Agustín Ijalba es escritor. Durante dos años mantuvo la columna de análisis de la realidad Por arte de birlibirloque En este espacio publicará Retales todos los lunes. Retales dejó de actualizarse en febrero de 2007.
Con la mañana cogida de mi mano, paseo buscando sombras donde cobijarnos. Entramos en una librería y nos llevamos dos libros, uno para cada uno. En un banco de la plaza nos sentamos y apacibles leemos. Al levantarnos para seguir nuestro paseo, observo de reojo el libro que la mañana ha escogido para leer: sus páginas se abren a medida que andamos, y al abrirse caen diminutas letras sueltas, que van a parar a las aceras. Las calles se cubren de tinta, y como si formaran una alfombra negra y mullida, las letras amortiguan los pasos de la gente hasta hacerlos inaudibles. Me detengo y advierto que delante nuestro un pequeño tumulto de letras vuela alrededor del libro que la mañana lleva en su mano, como si fueran abejas alrededor de su panal. El libro las absorbe y escribe con ellas relatos breves entre esquina y esquina. Al pasar la página las deja caer sobre la acera para alfombrarla junto al resto de sus compañeras.