Arístides Segarra es escritor. Anteriormente ya fue construyendo Estilo familiar en Almacén. Estilo familiar dejó de actualizarse en octubre del 2006.
Sí lector amable, no me encuentro muy bien. Hay noches en que, tras una hora de sueño, me desvelo. La causa no son las preocupaciones. Si eso fuese, no dormiría nunca. Más bien es un deseo de realidad, de mundo físico: como huir del sueño, de la vida soñada. No diré que sea agradable, pero no lo vivo con angustia. Más bien es como si mi visceral rechazo de la metafísica necesitase una manifestación tangible, corpórea, un síntoma, no un signo.
Durante estos desvelos, en que mastico con lentitud la presencia quieta, nocturna, de la realidad, Aristóteles me susurra cadenas de causas y consecuencias que llevan de la nariz de Cleopatra a la guerra de Irak, pasando por la motosierra con que George W. Bush deshace el nudo gordiano de su ser en el mundo desde el rancho, según confesión de su esposa, a quien, por lo visto, le hace mucha gracia. Y piensa que se la hará al resto de la humanidad.
Otras veces santo Tomás gusta de recordarme que Dios no pude hacer que lo que ha pasado no haya pasado nunca, aunque en ocasiones ceda su turno al discípulo que sólo creyó cuando vio y tocó, lo cual le fue inmediatamente reprochado. Qué extraña resulta la sensatez en medio de la histeria.
Mucho me temo que mis acompañantes me dejarán pronto: san Agustín parece haber tomado de nuevo las riendas de una nave que él mismo botó, la teología moderna. No es baladí que la iconografía cristiana le represente con un corazón, y a santo Tomás de Aquino, a quien correspondió la ardua tarea de separar la teología de la mística, con un sol. Pero no sé de que me quejo, pues ya lo decía el viejo aforismo del siglo XII, citado alguna vez: Deus est tenebra in anima, post omnem lucem relicta. La Iglesia vuelve al Dios de las tinieblas.
2005-05-06 15:24 Háztelo mirar. Si te habla tanta gente por las noches, es conveniente que te lo mire un especialista de los buenos. El que seas capaz de transcribir tus pensamientos y conversaciones, no mejora el pronóstico de lo que te pueda ocurrir. La salud es así.
Sin embargo, he de decirte, coincidiendo con los personajes que te visitan, que la filosofía y la reflexión son las artes fundamentales del ser humano, sobre todo en el camino de la busqueda de la verdad, pero con orden y sosiego, hermano…
2005-05-08 08:59 All that we see or seem is but a dream within a dream…
Dsifruta la función, hermano! no te compliques los sueños.