Esta columna es un experimento. No forma parte de mis placenteras entregas de opiniones misceláneas que publico cada mes. Es más bien una coda a un vieja serie de posts de mi blog, titulada Libros para gente miserable. Entonces se trataba de hacer recomendaciones de Sant Jordi, con un ojo, más o menos libérrimo, canónico bajo excusa humorística.

Ahora se trata, precisamente, de recomendar libros imperfectos, pequeños, genuinos regalos. Dos de estos libros pueden leerse gratuitamente. Ustedes dirán.

Today the sky is blue and white with bright blue spots and a small pale moon and I will destroy our relationship today
Tao Lin.
Autoedición online. Leer

De momento el estadounidense Tao Lin es un hype antes que una realidad: su estilo, ocasionalmente histérico y de vocación sintética, carece de las virtudes de sus precusores. No tenemos la ironía sorprendente de Lorrie Moore, ni la pulsión por el detalle de Richard Yates. Si se parece al estilo concreto y low-fi de Miranda July, no por casualidad vindicadora del autor. En este libro de relatos están muchas de sus virtudes, entre ellas usar la concreción para narrar una escena frecuentemente común en términos inusuales y un poco más dolorosos de lo habitual y una destreza para la elipsis.

El señor Valéry
Gonçalo M. Tavares
Random House Mondadori, Barcelona, 2006. Traducción de Rita Da Costa. Comprar

Dos son los proyectos en marcha del escritor portugués Tavares: O Reino y O Barrio. Sería injusto tener claro que O reino, el lado ambicioso del escritor, es una muestra clásica de Arte Elefante, de gran novelística, ya que La máquina de Joseph Walser forma parte de ese proyecto. Pero O Barrio es, de momento, la más satisfactoria en conjunto y esta nouvelle ilustrada una perfecta muestra de feliz jugueteo metaliterario sin excesos miméticos, ni sendas esperables. Un pequeño y humorístico tesoro.

Isabel y los Monstruos Luminosos.
Alber Vázquez
Ed. Libro de Notas. Descargar/Comprar.

Angela Carter publicó The Bloody Chamber en 1979, una colección de parodias, más o menos siniestras, de cuentos de hadas que podían leerse a la luz psicoanalítica de Bruno Bettelheim. Hay pormenores en este libro en su antesala hacia el final, pero lo que se pretende es postularse como opción intermedia entre el viejo cuento de hadas, ahora eco, y la autoconsciencia de temas perturbadores aportada por gente como Carter, pero con el viejo estilo de aventuras de novela juvenil.

La Novela Gráfica
Santiago García
Astiberri, Bilbao, 2010. Comprar

Acabo de terminar este ensayo sobre tebeos y hay muchas cosas disputables. Por lo que, creo, que el autor ha triunfado en su propósito: proponer una tesis y lanzarla a una discusión muy interesante. Como recorrido histórico del origen del medio y su evolución es intachable. Como libro de apuntes es muy estimulante: el autor está especialmente atento a la mirada de los contemporáneos sobre sus precusores y maestros, demostrada en el interés que tienen por reeditar y canonizar autores tempranamente olvidados. Y como tesis es discutible, pero sólida, bien acotada: para García se trata de un recorrido hacia una forma distinta de high art (algo que conecta con ciertas ideas del último Eloy Fernández Porta) que exige una nueva crítica. Esperamos la lectura del columnista Acevedo

Ontología: Hermenéutica de la facticidad
Martin Heidegger
Alianza Editorial, Madrid, 2008. Traducción de Jaime Aspiunza. Comprar

Este libro recoge las clases que Heidegger ofreció en la Universidad de Frisburgo durante 1923. Recoge en un anexo algunas de las anotaciones que hizo a esas clases. Es, como todo el pensamiento del autor, un libro complejo y exigente, pero no se trata de un libro para iniciados sino de una excelente puerta de entrada puesto que explica los conceptos de ontología, hermenéutica y fenomenología, todos ellos rectores en el corpus del pensador alemán . El traductor anota gentilmente los trucos verbales del autor.

Desde la ciudad nerviosa
Enrique Vila-Matas
Alfaguara, Madrid, 2004. Comprar

Cambia Barcelona y el autor nos deja una inolvidable crónica de un mundo, sus héroes y sus escritores de visita. Se narra una crónica entrañable con los futbolistas cultos (con Guardiola), se glosan los palíndromos que Augusto Monterroso obligaba a memorizar (Salta Lenin el Atlas), se hacen muy interesantes apreciaciones sobre Los detectives salvajes (La grieta —tema y bloque central de Los detectives salvajes— es un conjunto de cuatrocientos golpes o cuatrocientas páginas con una casi infinita participación de múltiples voces que comentan los trazos de las huellas de los dos detectives salvajes y a la vez comentan cómo lo desastroso se instaló en el centro de gravedad de la historia de una generación extravagante).