Nos encontramos en alta mar. Entre Milford Haven y Waterford. Una tarde gris de otoño de 1824. Golpes de viento, mala mar y mucho frío. William Davies Evans tiene 34 años y hace 20 que los pasa en el mar. Está jugando una partida de ajedrez. La ganará. Fue en el mar, ya hace tiempo, donde el joven William se aficionó a este juego. Nunca será un competidor de alto nivel, pero dejará una profunda impronta en la historia del ajedrez.

El Capitán Evans se está rascando la barba. Juega con blancas. Ha abierto con 1.e4 e5 2.Cf3 Cc6 3. Ac4 Ac5. La Italiana.

Extiende la mano con naturalidad para jugar el siguiente movimiento, probablemente quiere mover el peón de c. De pronto, un brusco golpe de mar inclina el barco. Evans toca descuidadamente el peón de b2 con los dedos… “Pieza tocada, pieza jugada “, le pasa por la cabeza.

El Capitán coge el peón de b2, y después de penetrar un instante en la mirada de su oponente, lo avanza dos casillas. Nace el Gambito Evans: 4.b4!, un sacrificio de peón que encajará como anillo al dedo en el espíritu romántico de la época.


Gracias a un capricho de la naturaleza, Evans acaba de descubrir un camino oculto: el tiempo que perderán las negras para capturar el peón, es el tiempo que les haría falta a las blancas tras c3 para preparar d4. La idea, pues, es atraer el alfil negro con 4…Axb4, para después de 5.c3 ganar un tiempo precioso con la intención de abrir el centro con d4.


La estrategia consistirá en tempus versus materia . Si se establece un centro fuerte con peones vía c3 y d4, se abrirán peligrosas diagonales de ataque por parte de las blancas, por ejemplo:


Aunque en esta apertura es habitual aceptar el peón, también es posible declinar el gambito jugando 4…Ad6, 4…Ae7 o 4…d5. Hay para todos los gustos. Vosotros mismos, pues.

Años más tarde de aquel incidente, Evans conocería a Alexander McDonnell, jugador relevante de la escuela Romántica, que influiría en la difusión de esta variante de la apertura Italiana. El gambito Evans sería habitualmente jugado por jugadores de élite de aquellos tiempos: McDonnell, Labourdonnais, Morphy, Staunton, Anderssen y Blackburne, entre otros.

Veamos unas partidas jugadas con el Gambito Evans en aquellos años.

El Capitán Evans vs Alexander McDonnell. Dos barbudos del ajedrez

Adolf Anderssen vs Jean Dufresne. La llamada Siempreviva , una partida encantadora.

La Bourdonnais vs McDonnell. Una de las partidas del famoso duelo de la época.

El genio Paul Morphy vs Theodore Lichtenhein.

Hermann Clemenz vs Eisenschmidt en una romántica partida con un bonito final.

Dieciséis años después de aquel golpe de mar, Evans jugaría también contra el mismo Howard Staunton en Londres, pero no se conservaría ninguna partida anotada.

El llamado período Romántico del ajedrez se desarrolló plenamente entre 1830 y 1880.
Las partidas solían ser abiertas y de un carácter mucho más táctico que estratégico. Los maestros de la Era Romántica desarrollaron sobre el tablero su imaginación. Su necesidad y objetivo fueron crear belleza. Produjeron Gambitos, espectaculares ataques de mate y brillantes sacrificios. Esta etapa de la historia del ajedrez tuvo como máximo exponente el maestro alemán Adolf Anderssen, quien una vez afirmó: «El verdadero arte del Ajedrez radica en las combinaciones». No sospechó que el ajedrez evolucionaría adoptando conceptos estratégicos y posicionales que lo harían aún más profundo y bello.

Para saber más sobre el Gambito Evans

El Gambito Evans (Facsímil en PDF de la Escuela de ajedrez Miguel Illescas)
Entender las aperturas. Gambito Evans (Vídeo)
Chess Lesson. Evans Gambit Opening (Video)
Paul Morphy vs Amateur. Evans Gambit (Vídeo de la partida comentada)