Se publican aquí críticas de libros que por algún motivo —pequeñas editoriales, escasa distribución, desconocimiento del autor, fuera de modas— no aparecen en los medios y publicaciones tradicionales.
por Santiago Viteri
Klaus Mann
El Libro de la Riviera
El Nadir
127 páginas | 19.95 €
ISBN: 978-84-93-64-04-15
Este es un libro de viajes realmente curioso. No sólo nos va a trasladar a la costa mediterránea de Francia y parte de Italia, sino que además nos traslada en el tiempo, a principios de los años treinta. Los hermanos Mann, jóvenes, ricos y mimados, recorren y describen minuciosamente, este paraíso que fue la Riviera para los europeos acaudalados de principio de siglo XX.
Por eso, leer este libro de viajes que pretendía contarnos lo que no contaban las guías oficiales de la época, permite conocer detalles prácticos probablemente obsoletos hoy en día, como cuál es la mejor manera para llegar a Niza o Montpellier, si en tren o en coche por la carrera vieja o si conviene alojarse o disfrutar del almuerzo en tal o cual restaurante.
Mucho me temo que la mayoría de las recomendaciones sirvan de poco para el viajero del siglo XXI, aunque se queda uno con la intriga de saber si aún existirá ese local nocturno del puerto que tanto gustó a los autores, o si las tiendas de artículos exclusivos continuarán ofreciendo sus productos a los turistas de hoy.
Además de los consejos para viajar, este libro descubre algunas de las razones por las que la Riviera ejercía tal fascinación en los europeos de la época. De este modo el clima benigno del mediterráneo, el carácter de los habitantes de aquellos pueblecitos, el glamour de los “grand hoteles” y los casinos donde entregarse a la pasión del juego cautivaban a famosos, artistas, nobles y adinerados que popularizaron esta costa convirtiéndola en un lugar fascinante.
Es muy divertido leer las anécdotas que relatan los hermanos, en su estilo calculadamente frívolo sobre pintores, escritores y otros personajes de la vida bohemia que pasaban en la Riviera sus temporadas de descanso.
Es importante advertir que el libro no narra una historia, no es una novela, es un auténtico libro de viajes, y su lectura tiene un interés más bien antropológico.
En cualquier caso este libro, pese a su desfase temporal tiene la virtud de estimular en el que lo lee las ganas de viajar a la Riviera, de pasear por cada uno de sus pueblitos y playas, de comprobar que lo contado existe.