Dedicaremos el artículo de hoy a músicos que no necesitan a nadie para interpretar sus obras. Actualmente muchos músicos son capaces de elaborar por sí mismos, gracias a la tecnología, grabaciones en las que participan gran cantidad de instrumentos. Esto se hace grabando pista a pista de modo analógico, o más recientemente con un tipo de software llamado “secuenciador”, cada uno de los instrumentos de una obra, de modo que al final se reproducen todos juntos. Es como si el músico tocara consigo mismo en el pasado mientras tocaba otro instrumento. Pero no me estoy refiriendo a eso. Me refiero a músicos que son capaces de autoacompañarse, utilizando la jerga informática, “en tiempo real”, es decir, sin recurrir a grabaciones previas.

Un caso típico de este “yo me lo guiso, yo me lo como” es Bobby McFerrin, que además lo hace con su propia voz:

Si el talento de Bobby McFerrin se combina, además, con el uso de la grabación en varias pistas, tenemos un resultado como el siguiente, que además es una de las primeras animaciones de la mítica Pixar, nada menos que del año 1989:

Knick knack, de Pixar, con música de Bobby McFerrin

Con algo más de parafernalia electrónica, descubrí esta curiosa versión de Meddle, de Little Botts, como demostración de un artefacto llamado tenori-on:

Meddle, de Little Bots

Por su parte, Greg Pattillo es capaz de acompañarse con sonidos de batería mientras toca la flauta, lo que le da bastante swing:

Greg Patillo interpreta tema y variaciones de “El Inspector Gadget”

Pero lo de KazooKeylele ya es rizar el rizo. Véanlo acompañándose de un banjo + pianillo + kazoo o mirlitón, todo en uno y fabricado por él, además de su propia voz:

KazooKeylele interpreta The Final Coundown, de Europe