Vicio es todo en exceso y desmesura hasta que lo abandonamos por un nuevo vicio, o nos convertimos en coleccionistas de ellos. Nunca es tarde para desechar uno y encontrar otro nuevo. De los vicios y pasiones que exponen nuestra humanidad hablaremos aquí, en este espacio comandado por Elia Martínez-Rodarte, mexicana, viciosa y escritora, autora de ivaginaria, el día 6 de cada mes.
La marcha de las putas
Sobre la marcha de las putas, se está confundiendo el infundio con el tafanario. La protesta no nació en México este domingo 11 de junio cuando se manifestaron miles de mujeres pidiendo respeto por sus cuerpos y por su integridad, ni tampoco en Alemania, Estados Unidos o en cualquier otro sitio en donde se esté fraguando en este momento. Nació en 2010 en Canadá, en una universidad de Toronto, en la Facultad de Leyes de York. Un policía en una conferencia dijo a los presentes: “La mejor forma de prevenir un asalto sexual, es evitando vestirse como una puta”.
Canadá siempre se ha caracterizado por poseer una sociedad civil organizada y por un alto interés en el respeto a los derechos humanos y la equidad de género. Por ello fue total la furia femenina y masculina ante este comentario tan lejos de la bacinica. Los candienses planearon de inmediato la Slutwalk (slut=puta walk=caminata) en defensa de los derechos de las mujeres a vestirse como mejor les viniese en gana. Bajo el lema de “No es no”, esta causa se ha extendido en todo el mundo.
Por ello quiero aclarar que no es una marcha que defiende a las prostitutas o sexo servidoras solamente. Es un movimiento que exhorta a hombres y mujeres a ser respetuosos de la apariencia, el vestido y la facha de las féminas. Si una desea salir en breves ropas y contonearse. Si a una se le pega en gana salir con la tanga arriba de los pantalones. Si cualquiera desea mostrar los senos hasta que enseñen el tostón. Si la de más allá sale a regar las plantas vestida sólo con un fondo o negligé… Es muy nuestro deseo, nuestras nalgas, nuestros pechos y todo el equipo que le acompaña.
Las mujeres según cómo se vistan, van a provocar un sentimiento y una reacción. Sea de admiración, de lujuria, de goloseo, de envidia o cualquier otra. Una cosa es que un bato se la menee pensando en la chica en shortcitos que ha visto pasar, y otra muy distinta que le meta mano, que la viole o someta sexualmente.
Los hombres en México, algunos (porque luego se arrancan en tercera y ponen caritas de “yo no soy así”), tienden a golosearse con las chicas y a externarlo, porque creen que están en su derecho de violar el espacio de una fémina diciéndoles barbaridades o untando camarón en el transporte. Ay… esas horas pico en el Metro, antes no me han hecho un hijo defeño.
Otros más gandallas, consideran que la que sale semiencuerada a la calle, está urgiendo a las multitudes a que la follen. Algunos que no poseen control de sus gónadas, van directamente a conseguir la carne a la que creen tienen derecho, nada más porque está expuesta. Eso es precisamente lo que combate la marcha: ese impulso masculino a tomar lo que se le pone enfrente nada más porque le es deseable; también contra la envidia de las mujeres, depredadoras que somos de nosotras mismas. Cuántas veces no han escuchado a una damisela decir: “ay es que Roberta se viste como piruja…” Y acto seguido la destaza viva a base de puras descalificaciones.
La marcha es digna y justa y la apoyo. Lo que debemos hacer primero, es educar a los hombres en el respeto y contención de sus impulsos sexuales y machistas. A muchas no les gusta que las piropeen en la calle, o que las miren con ojitos de perro frente a la carnicería (con perdón de los amados perritos), o que les intenten agarrar una nalga aunque cobren por ello.
Ayer que iba caminando por la calle, y no que me sienta la más sabrosa ni mucho menos, un hombre me oteó como si jamás hubiese visto hembra. Pensé: en estos ojitos urgidos está el propósito de la marcha. A mí me dio compasión esa pobre alma lujuriosa, pero a muchas les incomoda, especialmente a quienes no saben o no quieren lidiar con esos hambrientos de mujer.
Denle una pensada al asunto de la marcha, sin machismo y sin mesarse los cojones para contestar. Y platiquemos al respecto a ello aquí y en las redes: en @Ivaginaria en Twitter y en mi página de Facebook.
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2011-06-21 15:00
Bien dicho, bien escrito. Bien apuntado también lo de las mujeres: esto no es patrimonio del machismo masculino, principal aunque no único responsable. Los comentarios son de otra índole, pero el despellejamiento de fémina hacia fémina está por todas partes (estuve en una boda hace poco y lo comprobé de primera mano).
Lo que me parece más complicado es lo que apuntas al final: legislar y educar sobre la mirada es algo más bien jodido.
2011-06-21 20:49
Y a mí que me molesta ese concepto de que el hombre “no posee control de sus gónadas”, que tiene un doble filo muy peligroso: por una parte sirve de excusa para el que se siente con derecho a invadir y molestar; por otra parte es muy denigrante esto de tratar a todos los tíos como si fueran seres primitivos e irracionales, dominados por sus hormonas y sus más bajos instintos, que, pobrecitos ellos, ven una teta y pierden el control del lóbulo frontal. Oigan. Que estamos en el siglo XXI.
2011-06-22 07:13
Yo Apoye la marcha y fui a marchar con todas las chicas a Reforma, apoyo el hecho de que se les deba de respetar y dejar que sean mujeres libres en nuestras ciudades ya sin necesidad de llevar chaperones y que circulen solas a todas horas como en cualquier ciudad civilizada y de primer mundo.
Pero viendo el sitio en facebook de LMP me inquietan varias observaciones que me gustaría aborde aqui o en sus varios blogs.
1 La verdad es que a mi forma de ver, no se compara ver y echar un piropo (que no contenga groserías) con una violación o violencia fisica, hay un enorme trecho en ello y los hombres violentos son minoria en comparación con los hombres que piensan.
2 No todos los hombres somos malos así que seria genial que quienes participen en ello lo tengan muy en cuenta.
3 Entre los tanto fenómenos que ocurren en twitter están aquellas lideres de opinion llamadas Sextwiteras, valdría la pena que les echaran un ojo para leer lo que dicen y ponen todo el tiempo, que de algún modo contradice absolutamente todo lo que la LMP significa, son mujeres jóvenes, con muchos seguidores que hablan cosas como “No es violación si hay amor” y otras tonterías como “No entiendo a las feas que se ofenden cuando me burlo de ellas, deberían ofenderse cuando se ven al espejo, ese si es un insulto.” así que no dejarían de ser tonterías si no fuera por la cantidad de gente que entra en ese juego.
4 Lo mismo entre los mensaje cruzados que recibimos como sociedad http://laprimeraplana.com.mx/2011/04/29/fidelidad-o-no-fidelidad-el-calenton-empieza-en-la-cabeza/ en publicaciones como esta que pongo se invita al lector , quizá solamente aunque no se aclara… a fantasear como manoseos sin permiso, una mujer que acepta que un desconocido llegue de la nada y meta mano…
5 queda claro que hay dos clases de mujeres liberadas, unas que dicen ser como hombres y piden que “Por favor les falten al respeto” y otras que se ofenden hasta por que las miran.
6 Solo las mujeres ven algo tan extraño como miradas lascivas, perdonen pero las miradas a una mujer si no es para hablar con ella son o como para verla y no tropezar con ella o para verla y deleitar la pupila, se necesita ser un hombre con algún problema en su comportamiento o muy timido como para no ver a una mujer atractiva pero de eso a que la mirada sea calificada de Violencia, hay mucho trecho.
7 hay que insistir que en esta sociedad de patriarcal no tiene nada, hombres y mujeres hemos sido víctimas de varios aspectos propios tanto de hombres como de mujeres, debe de haber libertad pero no del machismo que como entidad no existe, sino de nuestros propios complejos y costumbres como seres humanos en general, la culpa no es de un solo sexo.
Por el momento te agradezco.
Saludos!
2011-12-07 10:59
Apoyo esta marcha, hace una semana se dio en mi país y me pareció excelente la postura que estas guerreras pusieron frente a la polícia y al machismo.
Saludos.