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Porque me quité del vicio por Elia Martínez-Rodarte

Vicio es todo en exceso y desmesura hasta que lo abandonamos por un nuevo vicio, o nos convertimos en coleccionistas de ellos. Nunca es tarde para desechar uno y encontrar otro nuevo. De los vicios y pasiones que exponen nuestra humanidad hablaremos aquí, en este espacio comandado por Elia Martínez-Rodarte, mexicana, viciosa y escritora, autora de ivaginaria, el día 6 de cada mes.

Esta pelón…

Debido a mi muy escasa cercanía con gente calva o que está a punto de estarlo, me he percatado muy poco del enorme problema que es para algunos hombres aceptar esa superficie poco poblada.

Es normal. Pienso que después de tener un pelambre debe ser algo traumático verlo caer en la regadera, dejarlo en el cepillo, o no sé, una cantidad de peores escenarios. Es un duelo.

El pelo en la cabeza, en la mera testa, guarda su íntima relación bíblica con la cuestión de la virilidad, la fuerza y la heroicidad.

Lo que es un hecho es que he conocido pelones que sobrellevan la calvicie con una enorme autoestima y han optado por el rape total, para no andar negociando con la pelusa que al final de cuentas ocupa trabajo de lavado.

El mejor argumento sobre la calvicie lo esgrimió un alguien peloncísimo, quien decía que su calva le daba prestigio como amante ya que era una especie de publicidad subliminal.

Lo interesante es que una de las causantes de la caída del cabello es la testosterona, la hormona del power masculino en todos los sentidos de la palabra.

La testosterona al fluir y combinarse con la enzima 5 alfa produce otra sustancia que se llama dihidrotestosterona; ésta debilita los folículos pilosos hasta dejarlos inservibles, y hete ahí la pelona.

Hace mucho se debatía si era por el exceso de testosterona que producían los calvos, lo cual no ha quedado comprobado, ya que en el proceso de la caída del pelo no influye cuánta hormona masculina ande tirando el señor, sino cómo reacciona a la enzima 5.

Este proceso es distinto en cada varón y es un proceso masculino casi exclusivo de los varones. Este padecimiento se da poco en mujeres. Menos mal.

Muchos creen que por pertenecer a cierta raza o pertenecer a determinado grupo étnico no van a ser calvos.

Pero tomen en cuenta mis queridos peludos, que la calvicie se presenta en el cincuenta por ciento de los hombres.

Es decir, la mitad de nuestros varones en el mundo son propensos a tener una genética que les provoque debilidad ante el temible ataque de la dihidrotestosterona que ferozmente depreda esas praderas.

La preocupación de los hombres por perder el cabello me parece muy tonta, pero respeto ante todo su temor porque a mi vez yo tengo mis propios complejos y taras.

Pero lo sexy, lo cachondo, la creatividad en el sexo y la iniciativa de fornicar no guardan ninguna relación con la existencia de pelo en la cabeza de un hombre.
Ahora los pelones cuentan con todas las opciones del mundo para dejar de serlo: desde injertos, masajes, shampoos, tratamientos y una mirífica industria dedicada a florecer pelos.

Una industria que crece paralelamente a la de la remoción de vello con depilación láser.

El sexo envidiable con calvos, así como los peludos, es una cuestión de fe en el individuo. No de pelos. Incluso al mismo rey de reyes del poder de las greñas, Sansón, su real talento y don, no provenía de sus pelos largos.

Su verdadero poder era la fe en Dios y su cabellera que ondeaba y lucía hermosa, era sólo una prueba de su amor al Señor.

Cuando los filisteos ayudados por la zorrísima de Dalila le cortaron el pelo y lo llevaron a Gaza para aniquilarlo, Sansón, ciego, pelón y perdido, oró a Dios y pidió su venganza.

El gran jefe Dios del Antiguo Testamento le dio su bonita vendetta y Sansón aniquiló a más de 3 mil filisteos y a él mismo, por desgracia.
Y todo ello, sin tener un pelo en la cabeza.

Elia Martínez-Rodarte | 06 de octubre de 2009

Comentarios

  1. Cayetano
    2009-10-06 15:44

    Esta muker cada día me gusta más, tranquilos de pelo voy sobrado así que no es asunto de testosterona, sino de … ¿como se llama la hormona esa que regula la alegría? ¿Eliarina?

  2. Elia
    2009-10-07 04:20

    Qué lindo comentario…Te agradezco mucho ese detalle tan caballeroso y amable.
    Un abrazo.
    E.

  3. MAngel56
    2009-10-09 03:18

    En verdad que hay mujeres sensacionales, y tu eres una de ellas Elia.. Ha de ser toda una experiencia platicar contigo.
    Saludos y Felicidades por saber lo que sabes y expresarlo como lo expresas…
    MA

  4. Cayetano
    2009-10-10 17:28

    Por cierto ;-)

    Pillados por los pelos


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