Vicio es todo en exceso y desmesura hasta que lo abandonamos por un nuevo vicio, o nos convertimos en coleccionistas de ellos. Nunca es tarde para desechar uno y encontrar otro nuevo. De los vicios y pasiones que exponen nuestra humanidad hablaremos aquí, en este espacio comandado por Elia Martínez-Rodarte, mexicana, viciosa y escritora, autora de ivaginaria, el día 6 de cada mes.
Parirás sin dolor...
Hace poco invertí algunas horas/mujer en explicarle a un amigo la razón por la cual a mí me parecía que la cesárea era un método de alumbramiento más cómodo y fácil que el natural. Yo pasé por una y me fue de maravilla, mi embarazo fue de manual y la experiencia fue muy gratificante, de la forma en que dar a luz a una criatura pueda serlo.
Como una vez le escuché decir a una divertida mujer de la generación de mi madre: que pujen las vacas.
Después supe que las vacas ni pujan, y fisiológicamente es un alumbramiento muy cómodo el de los cuadrúpedos mamíferos. De hecho nosotras deberíamos de parir así, en cuatro patas, ya que el bebé sale casi solo y la ley de la gravedad hace el resto.
Claro, no dejando caer el bultito al piso, sino que con asistencia de alguna matrona o cirujano se remueva al bebé de debajo de la madre, quien a estas alturas sigue maldiciendo estar en la posición de perrito. Es mil veces mejor que parir a la vieja usanza kikapoo, encima de un hoyo en la tierra, mientras la madre está en cuclillas.
No pude convencer a mi amigo de lo brillante de mi argumento. Él estaba empeñado a relacionar a la maternidad con sacrificio, dolor y lágrimas, por lo cual habría que fomentar a toda costa que se siguieran realizando partos naturales, ya que ese procedimiento de muchísimas formas beneficia la salud del bebé y de la madre.
Me sorprendió como un hombre sabe de todos los bienes que ofrece el parto natural y de como puede transformar la vida de las mujeres.
En ese momento algo en mí, en verdad, se rompió. Quizás ya estaba craquelado y tendía al resquebrajamiento, pero ahora sí se rompió todito entero. Ahí estaba yo, frente a un buen amigo, explicándole por qué es mejor para mí vivir una cesárea y él defendía un muy respetable punto de vista. Opinión emanada de un ser que jamás estaría ni a dos milímetros cercano de experimentar la sensación de un parto.
Entonces pensé con cierta tristeza que los hombres no nos entienden, y aún cuando se esfuerzan por entendernos, empatizan y aplican toneladas de paciencia y ternura, no nos comprenden, no lo harán en un futuro cercano y bueno…al final de cuentas no tienen por qué hacerlo, siempre cuando y la diferencia se asuma con justicia y tolerancia. Por lo pronto con tolerancia, vocablo que es en estos tiempos una especie de justificación y exhibición de nuestro respeto por el otro que nos es cercano en la cotidianeidad, pero lejano gracias a nuestros ocultos prejuicios.
Cuando le expliqué que yo ni loca pujaría por un parto por las arrugas y por el cansancio; que jamás alumbraría viendo cómo sale un chamaco de mi vagina depilada de malos modos por enfermeras-carniceras; ni que permitiría que me hicieran una episiotomía, que es la incisión en una parte cercana al perineo para que abra y abra la carne y salga el bebé; que no sufriría las infecciones y hemorroides del área; tampoco lo entendió y siento que él también se desilusionó. Ni siquiera cuando dije: “rajada en la zona del perineo, por donde está el culo”.
Prefiero el knock out de la inyección epidural, la apertura de las capas de grasa y piel de mi vientre y que salga a la humanidad mi criatura.
Por supuesto que siguieron los argumentos de que “mi mamá así lo hizo”, “que las mujeres para esos son”, y que la manga del muerto. Entonces ya no quise debatir. No creo que los hombres, al menos nuestros contemporáneos, nos sigan viendo como máquinas expulsa bebés o amamantadoras de la especie. Mucho menos como sus domestiques. Más bien creo que nosotras ya estamos aburridas de ser eso hasta cierto punto y ellos apenas se sacuden el pasmo que se les quedó impregnado en aquellos días en que mamá era su amor. Está bien. Estamos evolucionando.
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2008-02-21 22:24
Yo he parido varias veces, a traves de interposita persona, y nunca me han hecho cesarea.
A algunas interpositas si y no han tenido problema.
Saludos
2008-02-22 00:46
Me han dicho que en Europa las matronas rigen y tratan de llevar a las parturientas hasta la sala de expulsión en casa o en el hospital, según la forma natural.
Pero creo que es una chamba que no quisiera en lo personal aventarme, es la graduación de nuestro cuerpo hacia la desgracia, en mayor o mnor medida.
En fin, sólo es un punto de vista.
Gracias por tu visita Francisco.
E.
2008-02-22 14:56
Creo que tu opinión es fruto de la ignorancia, y no lo digo con mala intención (aunque confieso que me he irritado un poco leyendo tu post).
Cierto es que los partos por vía vaginal se pueden mejorar con respecto a lo que se viene practicando en los hospitales. Ya se está tratando de evolucionar en eso. Pero los niños nacen más sanos del modo natural, porque la compresión que sufren en el canal del parto les ayuda a que sus pulmones estén listos para respirar cuando salgan, por poner solo un ejemplo.
Para parir sin dolor ya existe la epidural. Y piensa que de todos modos muchas mujeres renuncian a ella porque el parto es más natural y favorable para el bebé cuando no se aplica.
Las episiotomías no se practican a todas las mujeres, lo de las hemorroides es poco frecuente y además la cesárea también puede tener secuelas graves.
Pero bueno, chica, a lo mejor dentro de poco puedes optar a que tu niño se incube en una probeta, para no tener que sufrir las estrías del embarazo. Y no te olvides de meterlo a los pocos meses en la guardería, no renuncies a ni una sola hora de tu trabajo como mujer libre e independiente que pareces ser, porque además, criar niños hace que salgan arrugas.
Pero antes de dar una opinión tan tajante, sé responsable y aprende un poco más sobre lo que nos estás contando.
2008-02-22 17:45
Por eso me gusta escribir sobre estas cosas, porque absolutamente nadie se queda indiferente a ello. Las mujeres cuando poseen una postura la defienden con mucha pasión porque es su punto de vista que han forjado en base a sus referentes o conocimientos.
No voy a debatir mi sabiduría o ignorancia sobre el asunto, porque es obvio lo que sé y lo que ignoro.
Lo que sí es que es una opción que afortunadamente estoy en posición de tomar porque así se me pega en gana ser mujer y ejercer las labores de tal. Y es muy válido. Como la opinión de Dora, de Paco…etcétera.
2008-02-23 01:55
Yo creo que cada mujer debería tener la oportunidad de elegir (lo que tampoco en Chile sucede por eso de la economía, o sea, hay que economizar) la manera de parir ¿por qué hay que sufrir si se puede evitar?, una pura lesa querría sufrir porque sí ¿no?
Un saludo desde estas lejanas (pata ti) tierras con un delicioso y caluroso verano…¡y que ya se nos va!
2008-02-23 20:11
Hum, pues creo que yo tampoco acabo de estar de acuerdo con el artículo, al menos con las razones que das. Aclaro que no he tenido hijos aún, y que el día que los tenga, acataré los consejos que me dé el médico: primero lo mejor para el niño, y después lo mejor para mí, por supuesto.
Lo que me asusta de tu exposición es que, de alguna manera, siento que estás negando nuestra parte “animal” (en sentido positivo, de “la naturaleza es sabia”, y tal). Si estamos hechas para parir así (y de hecho, ya se han expuesto arriba algunas de las ventajas), será por algo. Milenios de evolución para encontrar la mejor solución, ¿no?
La cesárea me parece perfecta como “plan b” para la más mínima complicación que pueda surgir, que es ahí donde deben estar los avances de la ciencia.
¿Que nos duele, que nos arrugamos, que pasamos dolor? Pues sí, así es la vida. No creo que los hombres piensen que eso sea natural debido a una mentalidad machista. Ni que sea de feministas alardear de que no queremos pasar por ello. Hombres y mujeres no somos iguales física o fisiológicamente, y la verdad es que me interesa mucho más conseguir la igualdad en el resto de terrenos socialmente construidos partiendo de que existen esas diferencias, no tratando de obviarlas.
2008-02-25 10:28
No puedo estar más de acuerdo con María José: no le veo el machismo ni el feminismo por ningún sitio al asunto. Sí afirmo el hecho de que de un parto vaginal una mujer se suele recuperar mucho antes: a los dos días te dan el alta, si no hay problemas, y la vuelta del útero a su antiguo ser es más rápida. Yo solo he tenido partos vaginales (dos niñas maravillosas), sin epidural, en un caso porque en la ciudad donde estaba no lo había, y en el otro porque como soy una preocupona, en vez de ir a una clínica por el seguro, me fui al hospital por la seguridad social (por aquello de que en neonatología están preparadísimos y eso); una vez allí, y aunque le dije a mi marido que no quería epidural (es que también soy una cagona), a las cinco horas o así ya la estaba pidiendo, pero mala suerte, el anestesista estaba ocupado en operaciones de ginecología (ya podían haber puesto uno solo para parturientas, leches, que éramos muchas; si a mí me atendió una matrona, porque no había ginecólogos suficientes, ja, ja). Te aseguro que tras los dolores de dilatación, yo lo de empujar lo llevo estupendamente.
La episiotomía comenzó a realizarse de forma sistemática precisamente para que, si se rasgaba el periné, no lo hiciera en dirección al ano. Hoy en día, de todas formas, parece que han concluido, tras varios estudios, que el rasgado cicatriza mejor que el cortado y que el riesgo de que llegue al ano se da solo en unos casos que es en los que únicamente debería aplicarse la episiotomía. Ahora, te puedo decir que, en mi caso, en que aún se hacían a tutiplén, ni el corte ni el cosido fueron terribles; ya te digo que tras treinta y tantas horas de dilatación, los otros dolores son como un rasguño. Y ver salir a tu hijo es una gozada.
Sí veo machismo, por ejemplo, en que la baja por maternidad y la baja por paternidad no se puedan coger a la vez, y en el poco tiempo del permiso de la madre: pero bueno, ¿es que no se puede disfrutar de una cosa tan maravillosa como es la llegada de un bebé a la famillia en familia? ¿Es que acaso el padre está equipado para la lactancia materna? ¿Es que el bebé tiene que pasar al biberón a los cuatro meses? O a lo mejor tenemos que aceptar que la OMS y los pediatras y ginecólogos nos den el mensaje de que la lactancia materna cuanto más, mejor (sin llegar a límites de dos y tres años, simplemente siete meses o así), mientras que la sociedad como mucho da una reducción de jornada en la que, organizándose en plan militar, no queda más remedio que acudir a ese instrumento llamado “sacaleches” (que no produce más leche en la madre, a diferencia del método de succión del bebé). Eso sí me parece machismo, o hipocresía.
Perdón por el rollo.
Un beso.
2008-02-25 17:55
Me perdi, lindas parturientas. Que tiene que ver el machismo con la cesarea y el “sacaleches” ?
Son cosas femeninas, no es asi?
Los varones, los hombres, los machos y los machistas pasamos sin ver. Como en el poker. Nuestra contribucion fue nueve meses ha.
No exageren su papel.
2008-02-25 18:39
Gracias a todos y a todas por pasar. ¿Por qué el hecho de que yo opte por parir como me dé la gana es un tema de debate?, ¿por qué las mujeres estamos condicionadas que debe de ser de tal o cual forma con animalidad incluida o con adiestramiento genético anexado?
Si yo quiero dar a luz en una alberca con deflines, en un hoyo sobre la tierra o en un spa suizo es mi opción. No es ser feminista, no tampoco progre, es una opción…
Es comodidad, o pragmatismo…es como las chavas que están urgidas a tener hijos porque se les va la edad: ¿quién dicta que así debe ser?, ¿necesariamente se tienen qué reproducir? No sé, hasta en el ser mujer hay demasiado prejuicios y ordenanzas retrógradas.
2008-02-25 20:16
Hombre, Elia, el hecho de que tú optes por parir como quieras no es tema de debate; es el hecho de que escribas un artículo diciendo que un hombre defiende el parto natural a pesar de que tú defiendes tu parto por cesárea, que te fue muy bien y me alegro, y poniéndole como ejemplo (al hombre) de incomprensivo y de “esto se hace así porque así lo hizo mi mamá”.
Por mí, que cada uno elija la manera, que creo que ya se hace: de hecho, la epidural se utiliza cada vez más y cada vez hay menos dolor en los partos.
Pero desde luego, el traer un niño al mundo, hágase como se pueda, por ahora es privilegio de la mujer (lo siento por los hombres, porque para mí se pierden algo precioso, aunque algo teníamos que ganar con tanta molestia con la regla maldita mes tras mes, ja, ja) y, ante semejante experiencia, en la que la verdad me da igual si me arrugo más o me salen estrías, paso de si soy mujer retrógrada, con o sin prejuicios. Solo sé que es una de las mejores cosas que me han pasado en la vida. Y una de las pocas que volvería a repetir.
Un beso.
2008-02-25 20:24
Yo también lo volvería a hacer por supuesto. A mi manera otra vez, claro está.
Y tienes razón Ana, la onda es debatir qué es lo mejor para cada una en ese momento importante y de muchas decisiones de por vida.
Saludos.
E.
2008-02-26 04:23
Muy interesante estos puntos de vistas, sin intención de echar leña al fuego ni debatir, sólo contaré mi experiencia.
Tenía 18 años cuando tuve mi primer hijo, y aún cuando le dí al médico la fecha exacta de mi última menstruación “él,que todo lo sabe” dijo que la fecha de parto era para la primera quincena de enero cuando yo estaba segura que era para mediados de febrero. Obviamente a esa edad, con mi madre super enfadada no había vuelta atrás me dieron fecha de parto para el 14 de enero (28 días antes) en una consulta el día 13 “él, que todo lo sabe” me jorungó con sus dedos hasta hacerme sangrar y dijo “eso está listo para mañana”. Llegado el día nada que ver, el sangrado desapareció y los dolores no vinieron, ese día a las 2 de la tarde me pusieron Pitosin y los dolores comenzaron a las 4 de la tarde y dí a a luz a las 5:45 con la ayuda de dos enfermeras que dejaron sus puños (con sendos hematomas) marcados en mi abdomen “supuestamente ayudando a bajar al bebé”, me hizo una episiotomía ¡para un bebé de 2,800 Kgr!, fue tanto el agovio que me desmayé y desperté al día siguiente. Pude caminar a los 15 y el bebé estuvo hospitalizado 30 días con ictericia y otras complicaciones. No vino la leche para variar.
Mi segundo embarazo, a los 25 años, dispuesta a no pasar por ese infierno de nuevo busqué un especialista humano y considerado, ese embarazo duró 40 semanas, en la última semana me realizaron una amiosentésis para verificar que todo estuviera bien (ya se estaba pasando de horno) con un peso aproximado de 4,500 Kgr, no me indujo el parto junto con mi esposo se decidió hacer una cesárea por diferencia céfalo pélvica. Me dieron de alta a los 2 días y al tercer día ya caminaba sin dificultad, le di pecho hasta los 10 meses. Un niño sin complicaciones.
Mi tercer embarazo, a los 30, también recurrí a un especialista Director de la Unidad de Obstetricia de la Cruz Roja (excelente persona) no había ningún tipo de complicación en este embarazo, pero ya no quería más hijos por lo que decidimos, los tres, hacer una cesárea para esterilizarme, una niña de 3,800 Kg, super sana, le di pecho hasta los 2 años y 3 meses y de mis tres hijos es la que mejor salud ha tenido y puedo decir que mucho más inteligente que los varones.
Mi moraleja en todo este asunto: es nuestro cuerpo y sobre él podemos decidir siempre y cuando no dañemos a nadie, no veo diferencia entre niños nacidos de una forma u otra, en lo que si veo bastante diferencia es en la lactancia, puedo dar fe que nada mejor que la lactancia materna, cero cólicos, cero alergias, cero sufrimientos para el bebé y el placer es mucho mejor que mil orgasmos.
Saludos
Un abrazo desde Venezuela
2009-05-03 04:40
Yo parí dos hijos sin dolor.
Parir con dolor es lo que nos han venido diciendo de generación en generación. Jadear como perra al momento del parto es lo más efectivo para que la criatura nazca sana y oxigenada. Borremos de nuestras cerrados cerebros que tenemos que parir dolorosamente o con heridas y espidurales.
Mis hijos no me hicieron sufir al nacer, sólo los recibí cansada de tanto jadear y con el orgullo de ser la protagonista traer dos nuevas vidas al mundo.