Alber Vázquez es escritor. “El mundo gira sobre un eje podrido” es una columna de opinión que se publica todos los lunes y que alberga como firme propósito convertir a este planeta en un lugar más habitable donde los hombres y las mujeres del mañana puedan compartir su existencia en condiciones igualdad y justicia. Estamos seguros de poder lograrlo. El mundo gira sobre un eje podrido dejó de actualizarse en abril de 2008.
Mi voto es mío y el próximo domingo se lo daré a quien me salga de la entrepierna. Es algo que tengo muy claro desde hace años: voto a quien me parece y nunca guiado por ideología alguna entre otras cosas porque, aunque quisiera, no podría. Es cierto que con algunas opciones políticas tengo muchas más afinidades que con otras pero, en general, no estoy al ciento por ciento de acuerdo con nadie. Ergo voto siguiendo criterios que pueden ser considerados muy sui géneris, pero que, a fin de cuentas, son los míos: voto para premiar, voto para castigar, voto para condenar, para dar una oportunidad más, contra el adversario de ese al que le doy el voto, a favor de una cosa que una vez dijo tal candidato y me pareció bien, porque la pava que es cabeza de lista me pone cantidad, etcétera. Voto lo que me sale de los huevos porque mi voto es mío y hago lo que quiero con él. Soy lo que, en jerga técnica, se denomina un indeciso: ese tipo al que hay que convencer ya que su decisión es la responsable de que unas elecciones pivoten hacia un lado o hacia el otro.
Porque eso es algo que saben muy bien los gurús de los partidos: las campañas electorales se hacen para tíos como yo. El nota que lleva votando toda la santa vida al mismo partido es un cero a la izquierda: llueva o haga sol, seguirá votando a los suyos. Los tipos de las campañas ni se fijan en ellos: son los pringados de los mítines, esos que salen por la tele agitando banderas y acercando criaturas a sus líderes para que se las besen. Una peste.
Pero yo no. Yo soy, amigos, un indeciso. La flor y nata del populacho. El típico indeciso que, a seis días de las elecciones, todavía no sabe qué va a votar. El inconfundible capullo que hace que fulano gane o que mengano pierda. El auténtico hijo de puta que logra que los directores de campaña pierdan el sueño. Lo mismo te voto; lo mismo no. ¿Por qué? Porque sí. Y ya está.
Foto (cc) Dr Zhivago. No puedo estar más de acuerdo con lo que pone en el cartel.
Por si esto fuera poco, tengo donde elegir: en el lugar donde yo voto se presentan nada más y nada menos que seis partidos con opciones claras de rascar algo: PP, PNV, PSOE, EA, IU y ANV. A los primeros y a los últimos los descarto de antemano: no pienso votarles ni borracho. A los primeros, por mentirosos y por sinvergüenzas, y a los últimos porque yo creo que eso de matar al personal que no piensa como tú está muy feo y ellos no. Así que no quiero tratos con esta gente. Ni en broma.
Por cierto, en casa estamos que trinamos, porque el abuelo de mi chati, que en paz descanse (el abuelo, no mi chati), fue fundador de Acción Nacionalista Vasca allá por el año 1930. Se trataba de un partido nacionalista vasco de izquierdas y llegó, como parte del Frente Popular, a ser miembro del gobierno de la República Española nacido de las elecciones de 1936. Cuando Franco se sublevó, la gente de ANV se organizó en batallones y se lió a tiros contra los fascistas: por poco no lo cuentan. El partido se extinguió de forma natural en la transición (se presentaron a las elecciones de 1977, pero no les votó ni Cristo). Ahora lo han resucitado miserablemente por puro interés pero, en fin, esa es otra historia.
Continúo y termino: de los cuatro partidos políticos restantes, votaré al que me dé la gana. Tengo todavía toda la semana para pensármelo. O para que me convenzan. De lo que estoy muy seguro es de que votaré. Sí, pienso votar. Total, como me ha tocado ser presidente de una mesa, al colegio electoral tengo que ir de todas formas. Así que votaré. Y juro por mis muertos que todavía no sé a quién. Ni puñetera idea. Me la sudan las izquierdas, las derechas, los nacionalismos y los centralismos. Daré mi voto a aquel que creo que puede hacerlo mejor durante los próximos cuatro años. Sólo a ese. Sea quien sea. Y tomaré la decisión quince minutos antes de votar. Así que, si me hacen el favor, comiencen a prometer, que yo escucho. Y anoto. Soy un cabrón con memoria de elefante.
2007-05-21 12:21
¿solo a los 6 que tienen opción de sacar algo?
http://loprometidoesdeuda.com
2007-05-21 14:59
Dices, Alber, que votarás a quien te convenza… ¿cómo? ¿Qué tienen que hacer para convencerte? No quiero que me cuentes qué quieres que te prometan hacer, sino cómo vas a discernir entre los mensajes veraces y los que no lo son, cómo vas a confiar en lo que te prometan.
Saludos
2007-05-21 15:25
La clase política actual la verdad es de poco fiar. La mayoría son buscadores de oro.
2007-05-21 15:30
No tengo ni idea, Marcos. No sé cómo diferenciar al que dice la verdad del que miente. En mi caso, sólo voto para elegir alcalde (no toca elecciones autonómicas en mi comunidad), de manera que me guiaré por puro instinto y que sea lo que Dios quiera. Fíjate, todos prometen lo mismo, más o menos, con lo cual, una elección al azar bastaría: todos van a hacer un montón por nosotros. Sin embargo, yo manejo datos que, como digo arriba, soy muy míos: para empezar, hay un alcaldable que me parece tonto y dudo que vote a alguien que me parece, de salida, tonto; otro no me gusta él, pero sí las cosas que gente de su partido ha hecho; y, al revés, hay otro que me gusta, pero su partido no es santo de mi devoción… Como ves, lo tengo complicadillo. Pero eso es ser indeciso. De lo contrario, no lo sería. ¿O sí? No lo sé...
2007-05-21 15:37
A propósito de elecciones y tal, en plan promocional, acabo de escribir Dos Rivales Casi Iguales y una de piratas . Por cierto en estas elecciones, como en todas las anteriores, yo no iré a votar. Nadie puede convencerme se ha convertido en un hábito ;)
2007-05-21 15:51
Hay dos tipos (supongo que simplificando) de absentismo: el del que no vota como un modo de mostrar su disconformidad con las candidaturas y el de que no vota porque pasa. Imagino Cayetano que perteneces al priemr grupo, pero ¿no sería mejor entonces el voto en blanco?
2007-05-21 16:00
Alber, te falta, lo que en estadística se llama. un grado de libertad. No me creo que el motivo por el que no vas a votar al PP sea el que dices, porque lo podrías aplicar a los demás. Comprendo que seas incapaz de votar al PP (por motivos distintos a los que expones), pero tu afirmación: “El nota que lleva votando toda la santa vida al mismo partido es un cero a la izquierda”, podríamos reconvertirla en algo como “El nota que es toda su vida incapaz de votar al PP o al PSOE (hay de los dos y muchos) es un cero a la izquierda”. Puede que en el País Vasco, con eso de que están el PNV y EA, tu razonamiento pueda tener cierta aplicación, pero en la mayoría de los sitios no.
En Madrid, tenemos PP, PSOE e IU, si utilizo tu razonamiento cambio mi voto de PSOE a IU, es decir, voto siempre al mismo gobierno, por lo tanto, no es a mí a quien deben dirigir sus campañas electorales. Supongo que muchos estaremos de acuerdo en que hay cosas del sistema que deben cambiar y que eso nos permitiría votar de otra manera. Pero tal y como están las cosas, lo único que puede generar reacciones en los partidos es el que puedan perder el poder de forma real y sólo los que son capaces de poder ejercer un voto de cambio radical, muchas veces contrario a lo que constituye su ideología de fondo (totalmente desorientada en la actualidad), ejercen cierto control de cambio. Yo lejos de sentirme orgullosa de ejercitar mi derecho al voto me siento como una idiota, podría no votar pero tengo la cosa esta del sentido de la responsabilidad que de momento me lo impide. Lo del voto en blanco parece como que me conformo. Lo que me sale natural es el voto nulo, pero para que surtiera su efecto debería hacerse de forma masiva, si no parece que te has equivocado al votar.
2007-05-21 16:16
Quizá podría añadir otra cateegoría que quizás dará pie a más de un debate. Soy contrario a la dictadura de la mayoría y al modelo de estado tal y como se presenta actualmente. Hay otras maneras de organizarse y ponerse de acuerdo entre vecinos. ¿Cuales son?. No me apetece ahora extenderme en temas de filosofía política cuya discusión aquí no lleva a ninguna parte. Resumo, votar, solo votar no sirve absolutamente para nada. La gestión de la vida pública requiere una intervención constante de los ciudadanos, no una vez cada cuatro años, el acto de votar es solo un simulacro de poder ciudadano.
¿Apostamos algo?. El TAV nos lo meterán por el culo nos guste o no. Los politicos locales o nacionales en realidad tienen muy poco poder. Sin embargo un sistema judicial eficiente serviría para pararles los pies, pero ya sabemos como funciona la justicia … Mientras unos y otros mangonean mi actividad política va orientada en otro sentido.
Solo pensar en el perfil psicológico estadístico de la mayoría (la que gana elecciones) me entra dolor de tripas.
2007-05-21 16:33
Cayetano, estoy totalmente de acuerdo contigo y me encantaría que en algún momento expusieras tus ideas sobre cómo entendernos “entre vecinos”. Yo estoy en absoluta crisis con esto y no veo ninguna salida. Sólo leer en tu texto la palabra “entre vecinos” me ha puesto el vello de punta al acordarme de algunas reuniones en mi comunidad o trabajo. Casi prefiero ir a votar cada cuatro años, aunque creo que no sirve de mucho.
2007-05-21 17:10
Pero es que estar de acuerdo con Cayetano (yo también) no soluciona las cosas; quiero decir que es un tema aparte. La realidad dice que hay elecciones y que depende de qué vote la mayoría tendremos un gobierno o tendremos otro; ¿que da igual? Sí y no. Para los problemas de fondo sí, da igual. Pero no para todo, aunque sea parecido; de hceho, seguro que el mismo Cayetano prefiere que ganen unos a que ganen otros: es ahí donde entra el voto electoral. Y como María José dice, con la oposición siempre. Y el problema de la organización vecinal y de las otras formas de ciudadanía es que no las hay, salvo casos excepcionales. Escuchana hoy por la radio que en no sé qué ayuntamiento (creo recordar que de 400 vecinos) llevaban toda la democracia presentando una candidatura de consenso: la excepción que confirma la regla, porque no acierto a imaginar siquiera ni uno sólo de los ayuntamientos, pueblos o lugares que conozco en que pudiera suceder eso.
Saludos
2007-05-21 17:58
Había escrito una bonita parrafada y no se porqué ha desaparecido por completo. En fin. Resumo:
Primero educación para adquirir habilidades sociales para hablar de un sistema democrático se necesitan ciudadanos que participen en los asuntos públicos. Participar no es figurar nominalmente.
No prefiero que ganen unos u otros, es algo indiferente. Ninguno puede hacer nada por que no tienen poder real. ¿Quien puede parar el TAV? ¿Quien distribuye los recursos en y a los ayuntamientos? Y otras cuestiones importantes que quedan fuera del ámbito municipal en Vizcaya: transporte normativa medioambiental por ejemplo.
Lo que suelo recomendar es la participación en movimientos ciudadanos organizados para temas puntuales, es un buen entrenamiento o ejercicio para ciudadanos desentrenados
En fin que ya comentaré algo más tarde que ando rebotao con la desaparición de la parrafadita anterior :)
2007-05-21 18:17
Pero Cayetano, no se puede ser maximalista en esto: hay ayuntamientos (esto sobre todo se nota en la política municipal) que todos vemos cómo cambian dependiendo de quién los gestione: líneas de bus, extensión del alumbrado, el alcantarillado o el agua, infrastructuras deportivas, facilidades para las iniciativas ciudadanas, etc, etc… son cosas que sí pueden hacer o no los gobiernos municipales. Poca cosa, sí, pero a muchos les facilita o mejora la vida.
Saludos
2007-05-21 18:44
El problema Marcos es que cada ayuntamiento es un mundo. No se como enfocar este asunto dentro del sistema de comentarios de LdN. ¿Generalizar?. Bueno.
Yo simplemente reclamo mi derecho a abstenerme, tengo muchas razones que no tengo intenciones de expresar en público. No quiero parecer misterioso simplemente soy cauto.
Abtenerse es una equivocación (tanta gente no puede estar equivocada), sin embargo es un error del que soy el único responsable, posiblemente porque estoy mal informado y soy algo terco.
Pero no voy a escurrir el bulto, que gente con Nombre y Apellidos utilicen la actividad política para promoción personal y de sus actividades comerciales es irrelevante, lo que me preocupa es la indiferencia y el pasotismo ante determinados problemas minoritarios. El TAV, por ejemplo, es útil a la mañoria de la población, pero a cuatro gatos nos complica la vida ¿qué son cuatro gatos? con una bonita plaza y dos farolas van sobraos … Huy no, que personalizo ;) quería decir otra cosa y me sale esta:
El PNV en Durango y en Mañaria ha realizado una labor notable, ha gestionado los recursos disponibles de forma eficiente y con criterios muy profesionales. Vota al PNV.
Sin embargo esto no soluciona el problema de fondo: Los ciudadanos no tienen poder real (ojo que no hablo de masas, mayorías y tal),
2007-05-21 19:01
Maria Jose: Mis idea de cómo hacer para entendernos entre vecinos pasa por un entrenamiento democrático previo antes de conseguir el título de ciudadano o vecino. Otro asunto es dónde, cómo y quienes entrenan. Los partidos políticos, en España, no son los más indicados para afrontar ese reto.
El problema es que hay que resolver cuestiones puntuales de a unos días vista (en la reunión de empresa, en la de la comunidad de vecinos de un edificio) y nos encontramos con pocas o nulas capacidades para entendernos, así gana la imposición de quienes tienen más poder (económico, militar, numérico, etc.) queda mucho para decidir en base a razonamientos consensuados … Las entidades que realmente educan no facilitan las cosas pero hay esperanzas, pequeñas islas en mi caso, que no me dejan ser totalmente pesimista. Con todo no es fácil y exige bastante esfuerzo personal. Otro día con más tiempo me extenderá sobre esto.
Saludos
2007-05-21 19:13
Por cierto en la bitácora de la semana:
_Se trata, en resumen, de un proceso en el que destaca la cada vez mayor atención que prestan los grandes medios en Internet a la colaboración del público, a diversos niveles, en la configuración de los contenidos. Interés potenciado por la dimensión participativa inherente a unas elecciones (cuestión que, por cierto, tampoco se le está escapando a la clase política respecto de esta campaña). De cualquier forma, también cabe preguntarse en qué medida los índices de participación ciudadana son realmente significativos, e incluso cuánto hay, por parte de los medios – y, desde luego, de los partidos políticos -, de interés por parecer innovadores #
Lo dejo apuntado para acordarme de otras cosas ;)
2007-05-21 19:14
Cada vez que intuyo que alguien pretende educarme, aprieto los puños, por si hay que liarse a leches. Todo del entendimiento entre vecinos es un cuento chino que no sucederá jamás. Desde el ejemplo más pequeño (mi comunidad de vecinos, que no somos capaces de consensuar ni la más nimia chorrada) hasta el ejemplo más grande (mira esa gran comunidad de vecinos que fue la URSS y que terminó como el rosario de la aurora). No me creo los rollos hippies, Cayetano. Y yo soy un tío supereducado. Tengo educación para parar un tren. Pero hay vecinos que, ya ves tú, van a su bola. Como yo a la mía. Y no nos entendemos ni a tiros. Así que lo mejor que se puede hacer, para qué engañarnos, es votar y que salga lo que diga la mayoría.
2007-05-21 19:48
Albert: No pretendo educar o des-educar a nadie. Esperaba contarlo más tarde, sin embargo hay va:
Es posible integrarse en comunidades de trabajo orientadas a resolver problemas o sacar proyectos adelante, el perfil de sus integrantes es determinante para el éxito de esa empresa (en tanto que proyecto). Solo apunto el hecho de que la empresa llamada comunidad de vecinos o ayuntamiento o escuela está abocada al fracaso (o éxito relativo y aparente) no cuenta con miembros capaces para resolver el problema planteado. Primer punto.
Ayuntamiento, Nación, o comunidad de vecinos no son necesariamente proyectos que a mí me interesen, son empresas que están ahí en las que yo libremente decido participar o no. Esas empresas no me interesan así que participo poco o nada en sus proyectos, tengo otros y podríamos negociar (pero no se negocia se impone). Y no, no se trata de que forme parte de alguna secta u organización empeñada en el control del universo ;) tampoco busco adeptos ni creo que ciertas capacidades estén al alcance de todos.
Es más sencillo, hay a quienes ciertos proyectos empresariales no les interesan en absoluto, lo que cuestiono es la idea de que la única forma de convivir sea la de este sistema de partidos políticos.
2007-05-21 20:40
María José,
¿En serio consideras como viable el voto en blanco o el voto nulo? A mí siempre me ha parecido de pringados. Por Dios, si ningún partido te gusta, vete a tomar el vermú y déjate de sentidos cívicos y de responsabilidades ciudadanas, que tú al resto del mundo se la traes floja. Y si ya me invitas a mí al vermucito, pues ni te digo.
2007-05-21 21:42
No Alber: el problema del voto en blanco es mediático: si los medios le diesen la importancia que se merece (los políticos nunca se la darán porque es el mayor insulto que pueden recibir) podría ser muy importante: ¿un 5% del electorado piensa que no está representado por los partidos? Y fíjate, es un 5% porque la gente piensa en el voto útil, o en el vermú: si se valorase como se merece, quizás estuviésemos hablando de un 15% o un 20%.
Saludos
2007-05-21 22:06
Relaciones de poder
Siento molestarles a todos ustedes con cuestiones domésticas pero creo que un ejemplo concreto puede servir para explicarles alguna cosas.
En esta dirección web pueden encontrar una descripción visual del problema incluso es visible la casa donde vivo actualmente y desde donde envío este mensaje. Se trata de un asunto donde una minoría impone democráticamente un modelo de desarrollo que afecta a la vida de todo un pueblo.
Todo lo relativo a las explotaciones mineras depende de las decisiones que se toman en otras instancias superiores, donde el ayuntamiento puede intervenir es en temas tangenciales, en cierta ocasión la actividad de las canteras fue paralizada por el ayuntamiento a razón de una voladura que afectó a la carretera, la iglesia y a varias vivendas cercanas. Se pasaron tres pueblos, a veces se equivocan con las dosis. A los pocos días recibieron orden de restaurar la actividad desde el departamento de minas del Gobierno Vasco. Todo esto sucedía con el mismo partido político instalado en todas las instituciones.
Los ayuntamientos en realidad tienen muy poco poder cuando se trata de temas importantes.
El inicio de los tramos del TAV aumentarán la producción de estas canteras en incluso está previsto reabrir la de Atxarte, todas ellas dentro o cerca del parque natural de Urkiola. Obviamente este aumento en la producción no significa que los beneficios reviertan en el pueblo, como tampoco revierten los que obtiene Aguas del Norte de la captación de aguas de Mañaria para poblaciones como Ermua. Así las empresas mineras y la que gestionan el agua se embolsan los beneficios obtenidos de los recursos de un pequeño pueblo. ¿Se reinvierte? No demasiado. La cosa es que el número de habitantes no crece, a pesar de la bonanza económica, la gente que puede se marcha. En una palabra: degradación.
Esto no le interesa a nadie, solo a quienes les afecta directamente, como tantos otros asuntos. Y mucho menos a los medios bocineros que tanto joden a los políticos profesionales. Tampoco es un asunto de debate importante. Gracias al escaso interés que demuestran los ‘grandes núcleos de población’ por estos temas locales (que sumados son miles) determinados individuos (una minoría) pueden descojonar y medrar a sus anchas. Potenciar la comunicación entre grandes centros urbanos es una idea popular, se concentra mejor al rebaño más pastos y oportunidades de negocio, cultura urbana, centros faraónicos de producción y cultura. Pues bien.
Los altavoces potentes están en los medios generalistas, en los blogs donde se tratan cuestioens de interés general y/o nacional de tendencias culturales chachi piruli (gestadas, que bien, en el ambito cosmopolita y urbano que necesita trenes de alta velocidad para ir a ninguna parte). Y la primera estrategia es ofrecer información sobre los agentes implicados en este fabuloso negocio. Como votante (no se nos permite ser ciudadanos como luego se verá) no tengo muchas opciones para escojer entre la oferta de mi municipio. Los únicos que han demostrado ser eficientes en la defensa del medio y el entorno de este municipio han sido ilegalizados. Así que aquí gobierna (por decir algo) un solo partido. Y le va bien. Y aunque hubiera otras candidaturas, 400 habitantes no tienen demasiado peso en el capítulo de “politica general”.
¿A quien votar entonces? ¿De qué sirve votar exactamente? ¿Es un caso aislado y excepcional?
2007-05-22 01:06
Alber, si ningún partido te gusta lo que tienes que hacer es montarte tú uno, con dos cojones. Lo de irse a tomar un vermú mientras tus vecinos deciden por donde va a cortarse el bacalao durante los próximos cuatro años sí que es de ser un mandril.
2007-05-22 01:18
Alber, yo te invitaría a un vermucito ese día, pero creo que tienes cosas más importantes que hacer.
Y sobre eso de que se la traigo floja al resto del mundo habría mucho que decir (ya sé que ahora debería poner un punto y coma y un paréntesis, pero tengo una incapacidad de origen genético para hacerlo).
2007-05-22 19:44
Marcos, dices que cómo le van a convencer, cómo va a distinguir entre los mensajes veraces y los que no lo son. Bueno, yo ya antes de saber si van o no a cumplir lo que me ponen de color de rosa, tacho a los que me prometen rosas que para mí son color tirando a marroncito feo. Con lo que se queda uno con menos en la lista de elegibles.
Luego puedes comparar si alguno estuvo ejerciendo en la legistatura anterior: de esos políticos sí puedes comparar qué prometieron y qué cumplieron (sin ser simplistas, claro).
De los nuevos hay que fiarse o desconfiar, según cómo lo cuenten: cuando no dicen nada ni se casan con nadie, cuando siguen las modas de que su prioridad va a ser luchar contra el cambio climático —en unas locales y municipales—, yo aconsejo la desconfianza total.
Se puede optar por lo que hacen multitud de personas: votar al que le cae simpático. Aquí en Rivas, el alcalde actual ha hecho una campaña estupenda, y no creo que se haya gastado más que los demás. Dan ganas de votarle. Pero yo soy de esas personas que votan a un equipo, un programa, una ideología, una persona con gente detrás… , qué incomodidad.
De hecho, para las opciones que tengo, me quedaría con María José con el voto en blanco, si, como dice Marcos, le dieran la importancia que tiene. Imaginaos: acude un 85% de la población censada a votar y el voto en blanco es de un 30%. Vamos, como para que los políticos se pusieran a hacer malabares y a pensarse en qué fallan.
Alber, que quedan cinco días, ¿te has decidido ya? Y tú tienes suerte, aquí son locales y municipales. Y seguimos pensando.
Un saludo
2007-05-22 20:12
¡No, no, por Dios, qué me voy a decidir…! Insisto: yo soy un indeciso y, en consecuencia, decidiré de cualquier forma y a última hora. El domingo me tengo que levantar a las siete de la mañana para ir al colegio electoral, así que, mientras me doy una ducha, reflexionaré ampliamente sobre las perspectivas que se me abren en los próximos cuatro años. Me he comprado un gel de baño con aroma a té verde y a flor de naranjo (que recomiendo vivamente) gracias al cual espero aclarar mis aún confusas ideas.