Ingredientes: 2 onzas de realidad, 1 onza de ficción, 4 gotas de ironía, 1 pizca de mala leche.
Preparación: Mezclar todos los ingredientes en el procesador de textos y servir adornado con signos de puntuación. Puede completarse con ginebra, vodka, tequila…
Tras la barra cada viernes Concha Mayo, nacida en Barcelona, escritora y fotógrafa ocasional.
Se cayó. Se le quebró una clavícula. Y algo crujió entre las circunvoluciones de su cerebro.
Ya no hacía planes de futuro. No recordaba el pasado.
Su melodía chirrió. Sus palabras se volvieron reiterativas y sus sueños quedaron suspendidos. Los de ella también, aunque su vientre seguía creciendo.
El quería alcanzarla, sentir la vida crecer en su interior. Pero tan pronto como parecía lograrlo, el disco daba una vuelta más y el surco deforme le hacía retroceder de un salto.
Se cayó. Se le quebró una clavícula. Y algo crujió entre las circunvoluciones de su cerebro.
Sus planes quedaron pospuestos. Sus recuerdos también.
Puede que simplemente esté soñando que se le ha roto el tiempo.
2009-04-20 20:55
Cuantas veces no hemos caído en ese andar sin fin de nuestro cerebro en nuestra presunción de grandeza y de falta de humildad