TdC es un diario de lecturas, un viaje semanal por la cultura. Marcos Taracido es editor de Libro de notas. Escribió también las columnas El entomólogo, Jácaras y mogigangas y Leve historia del mundo [Libro en papel y pdf]. Ha publicado también el cómic Tratado del miedo. La cita es los jueves.
1. Los personajes de Jason no tienen pupilas. Sus miradas son vacías, neutras, pozos a los que uno tiene que tirarse para saber si llevan agua o están tomados por el lodo, o la soledad, o el miedo.
2. Los ojos vacíos son la parte más visible de toda una poética de la contemplación, contemplación del lector: sus viñetas son un teatro austero, de ritmo lento, como si los personajes se plantasen mirando a través de la cuarta pared para ser contemplados, aquí estamos, así somos, no hay nada más ni nada menos, somos un espejo de vuestro estatismo en la butaca.
3. Los personajes de Jason son animales antropomorfos; la máscara produce un alejamiento de la realidad que sirve para que, a través de él, podamos ver con una distancia de seguridad nuestro propio mundo, creyéndonos que no nos salpica la sangre y los sesos esparcidos más allá de las viñetas.
4. (No, no hay violencia explícita, sino inocente, como los golpes y las muertes de los dibujos de la infancia, y cómo duelen)
5. Uno lee todas esas vidas solitarias, angustiadas, indecisas, con una neutralidad en la sonrisa que rara vez se define y tuerce hacia uno u otro lado, porque a veces contenemos la risa porque no sabemos si está bien esa alegría, y no lloramos porque ese pobre diablo al fin y al cabo se lo merecía. Transitamos por la desolación desconcertados.
6. La ternura y el surrealismo contenido; la paradoja, el minimalismo gráfico ma non troppo; la mudez o parquedad, los túneles y paralelismos estructurales: la desazón y el pasmo.
2012-09-27 11:55
Quedé inoculado, gracias.
2012-09-27 12:11
Lo que me fascina de Jason es su manejo de los recursos narrativos del cómic y de la estructura, tan sorprendente que te preguntas qué haría si usase todos los elementos que deja fuera (personajes más expresivos, encuandres más arriesgados, mayor detalle en el dibujo en general, diálogos en los casos de los cómics mudos…). Pero es que no los necesita: con cuatro monigotes te cuenta historias originales y ciertamente complejas. Hace flashbacks, viajes en el tiempo, episodios oníricos, escenas paralelas en el tiempo. Pocas veces te da explicaciones: para entenderlo basta con estar un poquito atento, y eso hace que te sientas perspicaz, incluso listo. Lo que significa que el verdaderamente inteligente es él, claro.
2012-09-28 09:56
Yo creo que no sólo no necesita todos esos recursos, sino que resultarían un estorbo, y que es precisamente esa ausencia la que genera su poética y su poder de seducción.
Saludos.