No hay duda de que Jorge Portillo es valiente, porque se le va a echar encima media internet, o la internet entera. Dice que la descarga de música a través de las redes P2P es competencia desleal; yo siempre respondo lo mismo: ¿cuántos se compraría el disco de no poder descargárselo? Extremadamente pocos. Argumenta más cosas, y, aunque no coincida con él, sin duda bien, pero mejor léanlo: “En las redes p2p no se comparte cultura. Compartir implica participar en el usufructo común de un objeto único, y no en la distribución indiscriminada de múltiples copias, o partes de copia, de exclusiva propiedad individual. ¿Será posible aclarar el aparato ideológico que está justificando el impago convencido de este tipo de consumo cultural?” Tres apuntes sobre cultura digital y redes p2p.
2004-11-10 10:19 pues a mí me acabas de achantar, Marcos… ¿no era internet un medio de libertad de expresión? espero que en lugar de caerme encima media internet, alguien pueda responder honestamente a esta otra pregunta: ¿cuántos NO compraron el disco después de descargarlo?
el que saque el número más alto… ¿gana?.
2004-11-10 10:26 Ojo, Jorge, yo sólo advierto, y además, que te pongan a parir no coharta tu libertad de expresión.
En cuanto a la pregunta, es tramposa. Y te contesto a la pregunta sin trampas: yo me he descargado de la red discos que: 1. Son imposibles de encontrar en este país 2. Jamás pagaría por ellos.
Saludos.
2004-11-10 12:19 que a uno lo pongan a parir es posible incluso cuando se está callado y, en cualquier caso, un poco de polémica quizá me aclare algunas ideas: tengo demasiadas preguntas y pocas respuestas.
en cuanto a preguntas con trampa… ‘¿cuántos se comprarían el disco de no poder descargárselo?’ la que tú haces no se puede contestar objetivamente: el supuesto es inexistente (se lo pueden decargar) y la respuesta es subjetiva (el deseo manifestado por el comprador: un futurible). la respuesta a mi pregunta se podría medir.
en cualquier caso, las anécdotas poco importan. en un mundo tan globalizado, comprar en Nueva Zelanda no es imposible: es internet. salvo descatalogados (amparados por un error de distribución del propio mercado) ¿por cual música o libro no es necesario pagar? ¿no es un error del que compra? ¿cuántos objetos que no nos gustan, todos ellos abonados, acabamos acumulando?
pero todo eso es insignificante respecto al fenómeno en sí. básicamente: si dividimos el número de mp3 gratuitos que hemos descargado o copiado (descontados los de seguridad), por el número de cortes que tenemos en la discoteca de casa, nos dará un índice a calificar y algo en qué pensar: los modistas ya sabrán cual es la talla de nuestra pata de palo ;)
2004-11-10 13:02 Hola Jorge,
Quienes hablan o escriben sobre la industria cultural se refieren, casi siempre, a música y literatura. Intentan responder a esta pregunta: ¿Cuándo se come aquí?. Y muy especialmente autores vivos, que para seguir usando maquinaria, necesitan engrasar articulaciones con aceite de oliva y alubias. Productos, que si son buenos, resultan caros.
Personalmente estoy harto de oir música en los ascensores, grandes almacenes, tranvías, autobuses, bares, restaurantes, fiestas populares … Cuando quiero oir la música que me gusta solo hago eso: Oir respetuosamente lo que el autor está interpretando. No voy a explicar que música me gusta, pero escucharla en un equipo (por bueno que sea) me sabe a mierda.
Un ejemplo anti-mierda:
Monasterio de Leyre, invierno, maitines (6 de la mañana), un coro de 30 monjes, ni un solo microfono conectado a un amplificador, canto gregoriano. Apenas 10 espectadores
Y otros productos culturales que la gente desconoce. Sin embargo el marketing de la industria cultural promociona su producto en los ascensores, grandes almacenes, tranvías, autobuses, bares, restaurantes, fiestas populares. El producto es casi siempre, en mi opinión, una mierda. De lo que se come se cría, no es extraño que millones de personas tengan hábitos poco saludables, uno de ellos oir música o ruido a todas horas, en cualquier sitio, de cualquier manera. Tendría mucho que decir pero resumo.
Que desaparezcan las discográficas y toda la industria cultural me la trae al pairo. Si roban un cuadro de Munch, se quema el Museo del Prado, o la viuda de tal o cual escritor se queda sin sus rentitas me da igual. Si me importan los autores vivos que “sueñan y trabajan” fuera, olvidados o expulsados, de la industria cultural . Autores a quien nadie invitará a saraos como el Coito Real
2004-11-10 14:36 saludos Cayetano
estoy de acuerdo contigo en cuanto a que la mercado convencional de la cultura coarta la cultura. no creo que sea responsabilidad exclusiva de los artistas: las tendencias del mercado descerebran a artistas y a consumidores.
internet debiera de servir precisamente para vivir la creación (y de la creación) sin tener que ejercer ningún tipo de patrón cultural: ni económico, ni social, ni político, ni estético…
el asunto último que tendremos que debatir es el papel del artista, su concepto: ¿la libertad de creación y distribución supondrá la desprofesionalización (como actividad económica) de la creación artística? ¿es posible comer de un arte vivo y libre?
los creadores marginales son los que más pueden esperar de internet. la heterodoxia, la vanguardia, la experimentación… ¿siempre por afición? ¿por necesidad desnutrida?
yo no lo sé, pero sí sé que estoy hasta las narices de que cuatro sinvergüenzas se monten un chiringuito con yate por cuatro compases lobotomizados, y que la gente que alumbra todavía ande a oscuras por los supermercados.
ni la cultura ni internet son un limbo fuera del mundo: el dinero existe y es necesario.
claro que igual se trata de crear sólo en el tiempo libre, o de hacerlo cuando seamos pensionistas o mientras vivamos con papá. ¿alguien podría decirme cuánto tarda el reparto de pizzas en quebrantar la creatividad de un autor?
si internet no sirve para liberarnos del mercado actual… vámonos todos ahora al x-chat. será más divertido.
2004-11-10 15:21 La cuestión es muy sencilla: nada escapa al Mercado dentro del Mercado. Y no conozco a nadie, en toda la faz del planeta tierra (incluida la China ¡comunista?) que juegue a un juego diferente que el que marcan las reglas del Mercado. Supongo que serán posibles las islas de creación individual o pequeños oasis alternativos donde grupos específicos desarrollen sus proyectos de forma diferente. Pero Internet, hoy por hoy, es el reflejo de lo que sucede, en general, en todos los ámbitos de nuestra vida. No existe vida fuera del Mercado; y además no llego a imaginar tan siquiera cómo sería la vida cultural (la vida, en general) sin la posibilidad de los intercambios. Los monjes del Monasterio de Leyre, al menos, comienzan por disfrutar de un entorno mágico: el propio Monasterio que, en su construcción, tuvo que pasar por las reglas de interferencias propias de su época. Cuando, allá por el 82, unos amigos y yo intentamos montar un grupo de rock (punk, para más señas), nuestra capacidad adquisitiva impedía que pudiéramos acceder, ni tan siquiera, a un local de mala muerte. Pero esto es otra historia.
Por lo demás, las redes P2P son pistas rápidas de apropiación indebida de objetos culturales. Si yo escribo un libro (cosa harto difícil) y, debido a las reglas del Mercado, lo pongo en venta, el que alguien acceda a él indebidamente, de manera gratuita, será un modelo de estafa. Otra cosa es que, en el trayecto hasta la publicación del libro, el autor, y posteriormente el lector, hayan sido objeto de numerosas estafas perpetradas por intermediarios varios y personajes de dudosa reputación. Pero, ¡esto es la vida, señores! Todos juegan a la estafa y, por ello, todos nos consideramos inmunizados para practicar la estafa. ¡Maricón el último! Y, como decía más arriba, no existe vida fuera del Mercado. A lo sumo, proyectos de vida, cajones repletos de escritos polvorientos. O, lo que es mucho peor: islas paradisíacas donde también encarcelan a los poetas; es decir, todo muy complicado. Quizás, como explica Jorge en su artículo, la solución esté en el equilibrio. Pero, al robo, en todos los casos, hay que llamarlo por su nombre. Así de sencillo. Y así de complicado.
Un saludo a todos.
2004-11-10 19:53 Bueno, algunos apuntes sueltos:
Muy pocos consideran que Dulce vino de olvido es una obra de Net-Art. Un meta-collage. Nadie me va a pagar por ello, cabe la posibilidad de que un comisario interesado en estos y otros conceptos se interese por la cosa. Pero eso del meta-collage es algo demasiado complejo (de tan sencillo que es) para que puedan entenderlo. Pero me divierte hacerlo mientras, por ejemplo, vigilo el tráfico de información de uno a otro servidor (por eso y otras cosas si me pagan). Los comisarios no me sirven para nada, quizás sean útiles como intermediarios entre artista y cliente (entre ellos el institucional).
Una idea de Imanol Garaizabal (1975) Link Concert me llamó mucho la atención. Pude verlo en directo. Son gente joven que se buscan la vida como pueden y hacen cosas realmente valiosas. Tambien editaron un interactivo en DVD, Non demontre del que no se han vendido muchas copias. Pagué con gusto un ejemplar de otro trabajo suyo Una cama grande ¿Quién sabía de ellos?. Son de Elorrio (Vizcaya), no viven en París, NY o peor aún en Barna o Madrid. Sin embargo gracias a la red podemos conocer su trabajo.
La demanda de tráfico en la red aumenta, para encontrar productos que a fuerza de de entrenar al perro a babear se convierten en imprescinbles, pero no hay pasta, y hay que satisfacer la necesidad (gratis). La Red convierte las expectativas de negocio en ruina. Y aquí solo ganan las compañías que controlan las líneas o indexan los recursos gratuitos instalados en millones de servidores. Para terminar quiero ser útil Ficheros de música clásica de Ramón Pajares Box una colección de ficheros midi de música clásica, que tambien puede servir para instalarlos en su móvil: Más ruido. :-)
2004-11-10 20:04 Corrección de enlace: conocer su trabajo. Disculpas
2004-11-11 00:45 estaf-arte
amb. tendencia de última generación en la producción artística comercial.
2004-11-11 00:56 la red divulgará la obra de los artistas que empiezan, de los noveles, de los ajenos a los circuitos y los clanes.
si además, porque alguien de confianza nos los recomienda, o por azar, o porque Google algún día será el gran manager artístico, les podemos comprar obra, y nadie les roba, y facilitamos así su trabajo creativo (el número de horas que dedican a eso) pues… mejor para ellos. y para nosotros.
además vender o regalar la obra debe ser decisión del creador, y no de algún ‘espabilao’ que con la excusa de hacerles publicidad, cuelgue la obra en la red para poder intercambiar otro tipo de ficheros y autores.
compartir ‘generosamente’ el trabajo de otro es fácil. y moderno. pero a mí me suena a explotación.
2004-11-11 09:19 A modo de competición de bardos :-)
Robo:
Decía un ratero que pasaba más tiempo en la cárcel que fuera: Cuando llegué a este mundo, todo era ya de alguien. Era tan pobre, tan pobre, que ni permitían tener moral.
Explotación:
Michael Ende lo explica mejor en una historia que habla de ladrones de tiempo . La explicación cuesta 6.75 euros más gastos de envío. Hay quien los gana con 10 minutos de trabajo, otros necesitan una semana. Con todo el libro merece la pena. El libro es un enlace con coña, y espero que no le moleste a Michael allá donde quiera que esté. Por cierto yo hace años que compré su libro, no solo en pesetas, además le pagué con algo más valioso: mi tiempo de vida.
2004-11-11 10:35 P.E.D.O.S.P.É. (plataforma e-cultural de operadores sin patrimonio économico)
ONG dedicada a la difusión y promoción cultural de manera altruista, integrada por cibernautas pobres a los que, una vez descontada la conexión a 30€ y el ordenador de 900€, y obviadas copas y marcas, no les quedan recursos para comprar discos ni para ejercer la moral.
los compositores de cinco trienios, los ingenieros de sonido, las limpiadoras de estudios fonográficos, los productores artísticos de talla pequeña, los mozos de embalaje de las duplicadoras, los músicos de sesión y los técnicos de registro les están muy agradecidos: nunca antes tuvieron tanto tiempo libre para oir música gratis.
2004-11-11 15:18 Si lees mis comentarios en el artículo de Pedro Palazón verás que en el fondo estoy muy de acuerdo con algunos de tus planteamientos. Por otro lado hasta no hace mucho este era mi ordenador personal Se acabaron los recambios, se acabaron las páginas web accesibles, vinieron maravillas y ya no sirve una conexión RTB. Había que reciclarse, en máquinas y conocimientos. Y nos guste o no es un esfuerzo que hay que realizar si queremos mantenernos en un Mercado Cambiante y Puñetero. Cuando alguien acabe en el paro y disponga de tiempo libre, además de escuchar música gratis, debería considerar la posibilidad, como señala Carmen Castro, de poner en marcha un plan de mejora continua, pero en tu vida personal
2004-11-11 22:23 ¿en los concursos de bardos penaliza un poco de demagogia? ;)
realmente el paro en la pequeña industria de la música está también relacionado con la política comercial expansiva de las multinacionales, así que… estamos asistiendo al final de un modelo acosado en su totalidad.
yo busco; y encuentro que internet podría ser un lugar de realización personal. al menos, cuando escribo, me lo parece. pero me molesta, y mira que a mí no me afecta en mucho, la tecnocracia totalitaria, el pensamiento único y unívoco, la gente que cree que porque la tecnología le permite hacer algo, es correcto, necesario y, a veces obligado, hacerlo. y se impone esa práctica a los demás. ya sé: idealismo tardío, cositas de la edad…
me gusta el progreso, y tengo mi tufillo geek, pero a veces pienso en Hiroshima, el Prestige, el tráfico, las colmenas urbanas, las desigualdades económicas, el analfabetismo como geografía real, etc., la lista es interminable.
entonces busco una frontera y procuro encender una luz, aunque sea pequeña.
el progreso no se acuna siempre en los brazos de una tecnología avanzada. tenemos que dedicir qué hacer con ella y cómo usarla.
o matricularnos en Historia Contemporánea: de día si estás en paro, o de noche, si todavía no. como plan de mejora continua, la historia es, cuanto menos, una optativa razonable.
un abrazo Cayetano.