Muy interesante este texto de Enrique Aguilar en el que analiza desde la perspectiva del arte la película Melancholia, de Lars Von Trier. La destrucción de algo hermoso.
«Si el espacio que la rodea no satisface sus necesidades, es lógico que la novia busque su reflejo en otras instancias. Como decíamos anteriormente, el papel de la mirada es fundamental en Melancolía. La necesidad de ese desplazamiento se resuelve visualmente con un primer cambio de aires en el estudio donde Justine queda recluida, simbólicamente, después de ser amonestada por su hermana durante la fiesta. Su mirada lo dice todo, los libros de arte vanguardista con cuadros suprematistas no le dicen absolutamente nada. La pasión femenina que más adelante apuntará al cielo requiere un juego de formas diferente, más figurativo y sensual, menos abstracto y geométrico, de ahí la necesidad de buscar su reflejo en otros libros, en la pintura barroca y romántica.»