TdC es un diario de lecturas, un viaje semanal por la cultura. Marcos Taracido es editor de Libro de notas. Escribió también las columnas El entomólogo, Jácaras y mogigangas y Leve historia del mundo [Libro en papel y pdf]. Ha publicado también el cómic Tratado del miedo. La cita es los jueves.
1. Uno que sea sostenible, reutilizable, cuya adquisición suponga ser auténtico poseedor del objeto y todos sus contenidos, para poder compartirlos y usarlos porque sus contenidos no caduquen ni se estropeen con la práctica escolar.
2. Uno que sea manipulable, reformateable, cuyos contenidos puedan ser adaptados por el docente según sus necesidades particulares: cortar, pegar, reagrupar, seleccionar, reescribir… Lo que implica:
3. Uno abierto, accesible, sin barreras que obliguen a utilizar software propietario, sin contraseñas ni controles externos ajenos al propio docente.
4. Idealmente ubicuo, o al menos que su formato facilite esa ubicuidad, de modo que profesor y alumno puedan acceder a él en cualquier lugar, aula, biblioteca, casa…
5. Uno que aporte materiales de trabajo elegibles, que dé múltiples opciones y no marque un camino trillado.
6. Uno que sea multimedio y explote y se aproveche de todos los recursos que ofrece la tecnología. Libros de texto pangéicos.
7. Uno que sea –lo exigen la mayor parte de los puntos anteriores– fundamentalmente digital, sin renunciar al papel necesariamente, pero superando la supremacía que tuvo hasta ahora.
Y ese otro libro de texto posible necesita de otro acercamiento tecnológico al sistema educativo: en el próximo artículo trataré de explicar por qué considero un mal camino los proyectos de portátiles para el aula.