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Pura coincidencia

Santi Pagés es una marca, el nombre de alguien que no existe aún o solo a ráfagas. Un nombre cercano al de aquel que le da de comer pero también próximo en esencia al de esa otra encarnación que firma por ahí como Dr Zito. Nació en 1976, o quizás en 2005, o quizá ahora mismo, porque se lo han pedido, y vive en algún lugar, y en todos los lugares, que median entre Los Fríos Exteriores y Madrid, entre Edimburgo y Gallardongrado. Estudió durante años algo que solo revelará bajo tortura. Ha sido cura, pedófilo, cuatrero pacifista, mano derecha de Stalin y ninguna de estas cosas. Santi Pagés es una casa tomada, una niña poseída, Juan Raro, un semihumano, el mutante perfecto porque aúna al completo todas las imperfecciones de quienes le componen. Santi Pagés quiere ser tu amigo. Y después, durante la noche, convertirte en celulosa o celuloide. Lo que se dice un buen tipo.