Libro de notas

Edición LdN
Computacion creativa y otros sueños por Francisco Serradilla

Francisco Serradilla es poeta y doctor en Informática. Su línea principal de investigación se refiere al desarrollo de Softbots (Robots Software) y Agentes Inteligentes en Internet. Ha colaborado abundamentemente con Almacén como articulista. Computación creativa y otros sueños se publicará los 25 de cada mes.

Un sueño lúcido

Cuando ella murió, el mundo se convirtió en otra cosa. Todo significado cambió. Todo se cubrió de una pátina cenicienta de humo sólido y pesado que le robaba toda su energía. Cuando ella murió las sensaciones quedaron bloqueadas, la luz se coaguló. Los planetas siguieron rotando a duras penas. Y él siguió viviendo una extraña vida sin contenidos.

Un día pasó casualmente ante un establecimiento que anunciaba “Sueños Lúcidos”, y él, sumido en su mundo gris sin razonamientos ni sensaciones, no pudo cuestionarse la irracionalidad de su gesto. Leyó bajo el cartel: “El sueño lúcido consiste en la percepción consciente de uno mismo mientras duerme, resultando en una experiencia mucho más clara y en ocasiones permitiendo el control directo del contenido del sueño, proporcionando un mundo realista a su servicio”.

Entró. Siguió un cursillo de sueño lúcido que en unos meses le permitió controlar sus sueños, y a partir de ahí recuperó su mundo. Cada noche volvió con ella y todo fue como antes.

La vigilia quedó circunscrita a sus ocho horas de trabajo remunerado. De regreso a casa dormía… Dormía y soñaba. Al principio se conformó con soñar que todo era como antes: salir de cena, ir al cine y relatar los sucesos cotidianos. Luego descubrió que podían cenar los más fantásticos manjares en cualquier lugar del mundo, asistir a los banquetes de Las Mil y Una Noches, ver en el cine películas como jamás se han rodado ni se rodarán.

Sus días (más bien sus noches) se convirtieron en un largo peregrinaje por países y culturas, al principio reales, luego inventados. Llegó a ser, en secreto, el mayor maestro mundial del sueño lúcido, consiguiendo gestionar las maravillas que visitaba sin suprimir la riqueza del libre albedrío. Visitó planetas, galaxias enteras, conoció mundos y culturas inimaginables… Y todo esto con ella, siempre a su lado.

Descubrió un día que ella, sin dejar de ser ella misma, podía ser otras. Consiguió cambiar su aspecto a voluntad sin remordimientos, con la plena conciencia de que intelectualmente y en todo su ser siempre era ella. Los cambios físicos son banales, lo fundamental es la mente. La amó cientos de veces en diferentes cuerpos, en distintos países, en diferentes mundos.

Y vivió largos años, durmiendo quince horas diarias, ayudándose de fármacos. Sólo despertaba para ir al trabajo; era un pago pequeño y simple para su felicidad.

Murió a manos de ella, ultrajada, reducida y encarcelada en ese mundo extraño y profundamente ajeno, mientras dormía.

Francisco Serradilla | 25 de febrero de 2007

Comentarios

  1. Marcos
    2007-02-25 17:31

    Bonito regalo de domingo. Entre Borges y Cortázar.

    Saludos

  2. Sherezade
    2010-12-19 02:59

    Interesante relato, pero ¡qué es lo real! acaso no vemos el mundo en función de nuestra mente… y ¡qué son los sueños!
    ¿creaciones involuntarias o voluntarias? ¡quién viaja más! la mente o el cuerpo…
    Y si todo estuviera dentro de cada uno de nosotros.


Librería LdN


LdN en Twiter

Publicidad

Publicidad

Libro de Notas no se responsabiliza de las opiniones vertidas por sus colaboradores.
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons
Desarrollado con TextPattern | Suscripción XML: RSS - Atom | ISSN: 1699-8766
Diseño: Óscar Villán || Programación: Juanjo Navarro
Otros proyectos de LdN: Pequeño LdN || Artes poéticas || Retórica || Librería
Aviso legal