Aunque vaya a sonar un poco a publirreportaje, ya saben que cuando encuentro buenas ideas por ahí las cuento, y si son sobre cine pues las cuento por aquí. Aunque sea bajo las alas de una gran multinacional del textil.

Fabrica es un centro creativo y de investigación artística auspiciado por la marca Benetton situado en un pequeño pueblo Véneto llamado Villa Pastega Manera. Desde allí se imparten y realizan laboratorios creativos dirigidos a menores de veinticinco años en los que se explora y experimenta en campos como la fotografía, la videocreación, la música, el diseño, la publicidad y, por supuesto, también el cine. Aquí pueden ver algunos de sus trabajos, cortos y trailers

La idea es inmejorable: jóvenes —mucho— con bastante talento que tienen a su disposición un equipo creativo imponente y envidiable con el que pueden ser valientes, experimentar, aprender, tener desvergüenza y muchas más cosas que la mayor parte de los jóvenes realizadores apenas se atreven a soñar.

Este fin de semana tuve ocasión de ver unos cuantos trabajos gestados en Fabrica. Particularmente apasionante me parecieron los minidocumentales dirigidos por Alex Healey, pequeñas piezas de apenas cuatro o cinco minutos dedicadas a mostrar profesiones que se salen de lo común por su condición de obsoletas, de partes de un mundo ya desaparecido. Pero sobre todo la estrella de este pequeño festival de Fabrica que nos dimos era un documental dirigido por Valerie Gudenus y Heloisa Sartorato llamado I’m Jesus

I am Jesus from Fabrica on Vimeo.

A lo largo de setenta y pocos minutos, las directoras nos enseñan el día a día de tres personas que, en tres puntos distantes de la tierra y de tres maneras diferentes, afirman ser la reencarnación de Jesucristo. Un hippy inglés que se traviste de mujer y aficionado a las setas alucinógenas; un mesías brasileño que vive en una mansión en Brasilia rodeado de veinte bellas seguidoras; y un hombre en Siberia que logra aglutinar en torno a él a toda una población completa, que peregrina días bajo la nieve sólo para escucharlo. ¿No es apasionante?

Echen un vistazo a la página de vídeos de Fabrica y piérdanse por sus pequeñas piezas innovadoras y estimulantes. Un proyecto de esos que dan ganas de descumplir años sólo para poder saborearlo en primera persona.