Pues aquí seguimos con el resumen del año, empañado por la tristeza de la muerte de Blake Edwards, director de algunas de las mejores comedias del siglo XX. Pero en fin, vamos a ello:

Lo más tontorrón: Ben Affleck intentando ser malote malote y quedando en tiernico tiernico, y Rebecca Hall siendo la partenaire más tonta del año en The town. Y aunque algunos se tiren de los pelos, la aparición del “fantasma-gorila” de Uncle Boome… me ha parecido una de las chorradas de la temporada.

Lo más extraño: Insisto, toda Uncle Boome… de Apitchatpong Weerasethakul es una marcianada sin pies ni cabeza. El rompecabezas de sueños-dentro-de-sueños en el tramo final de Inception (Christopher Nolan): yo intenté hacer un esquema con papel y boli pero siempre se me quedaba un sueño fuera. A saber. La estructura del relato en La bocca del lupo (Pietro Marcello), fascinante e hipnótica, pero más rara que un perro verde.

Lo más divertido: A serious man de los Coen de principio a fin, para mí una de las comedias de la década. Cada una de las secuencias en las que salen los gemelos Winklevoss en La red social (David Fincher), con su perfecta interpretación del garrulo clásico de Harvard. Alguna escena suelta y viperina de Mine Vaganti (Ferzan Ozpetek) y uno de los momentos desternillantes del año en la última de Gabriele Salvatores, Happy Family: su protagonista acudiendo a un servicio de masaje-relax chino bastante… peculiar.

Lo más guapo: Entre las chicas: guapas y sexys las italianas Micaela Ramazzotti en La prima cosa bella de Paolo Virzì y Violante Placido en El americano, película absolutamente fallida de Anton Corbijn. Usando el adjetivo de mi compañero Guillermo Zapata, tremendérrima Vera Farmiga en Up on the air (Jason Reitman). Fenomenal la belleza imperfecta de Julianne Moore en A single man (Tom Ford) y apabullante —como siempre— la de Juliette Binoche en Copia certificada (Abbas Kiarostami).

Entre ellos: el maldito George Clooney mejorando con los años en El americano y en Up on the air. Es completamente injusto para el resto de los hombres. Tierno y atractivo como nunca el Vincent Lindon de Welcome (Philipe Lioret). Y Ewan MacGregor en El escritor (Roman Polanski), con todo lo que queremos ser los hombres: guapo, inteligente y un poco gamberro.

Lo más dulce: No puedo dejar de señalar lo bonita que está Elle Fanning en Somewhere, esa hija con la que todos los padres sueñan.

La película política: ex-aequo para The hurt locker y La cinta blanca, que dieron mucho que hablar y cuyas interpretaciones cubren todo el espectro ideológico. Ambas han sido tachadas de reaccionarias, izquierdistas, fascistas, comunistas, manipuladoras y realistas. Al mismo tiempo. Toma ya.

Lo más sorprendente: lo del Mundial. Que sí, que ya sé. Pero es que España ganó el mundial. Esa peli me la cuentan y no me la creo.

Pues a mí me gustó: Invictus de Clint Eastwood ha sido señalada con el dedo por su simplismo en el planteamiento y su optimismo casi naif. Yo la disfruté, por la historia, por los actores y, sobre todo, por el rugby.

La semana que viene toca el top-5 del año que, a diferencia del año pasado, lo tengo más que claro. ¡Hasta entonces!