Sentado en una vieja Butaca no numerada de terciopelo rojo, el autor se lanza a una reflexión impúdica todos los miércoles sobre cualquier cosa que se atreva a moverse por las pantallas, sean éstas de cine o no. Alberto Haj-Saleh es editor de LdN y autor de la columna Teatro Abandonado.
- Tradicionalmente el otoño es el momento de ponerse a ver cine. Hay algo que se confabula para hacernos creer que durante octubre, noviembre y diciembre realmente no hay nada mejor que hacer. Por si acaso, las carteleras de repente brilla que da gusto. Sobre todo tras el desierto veraniego.
- Parnassus brilla también, de forma deslumbrante, aunque sea por puro oropel y por papel de envolver de colores muy brillantes. Lo último de Terry Gilliam es una explosión de imágenes infinitas que no tienen un orden correcto, no cuentan nada demasiado complicado y no llevan a ninguna parte. Pero brillan, vaya si brillan.
- Mi acompañante y yo salimos de ver al Doctor Parnassus, al Diablo Waits y a las cuatro encarnaciones de Heath Ledger con otra película en la cabeza. The Fall (2006), del director indio Tarsem, es hermana de sangre de la locura de libro ilustrado de Gilliam. Por alguna razón, el recuerdo lejano de aquella me parece mejor que el recuerdo fresco de ésta.
- George Clooney es otro de los que brillan casi siempre, hagan lo que hagan. Tener las mismas cualidades de Cary Grant es una de esas cosas que deberían levantarte absolutamente feliz a diario. En The man who stare at goats es el eje perfecto de una película delirante y divertida donde el viejo Dr. Ross es guapo, simpático, interesante y ridículo sólo con mantener su cara más o menos circunspecta. Jodido suertudo.
- Salen tres animales en la película: un gatito, un perrito y, evidentemente, la cabra. No sé decir cuál me parece más imprescindible y con cuál me río más cuando lo recuerdo.
- Hablando de reír: un admirador, un amigo, un esclavo, un siervo. Ya lo echo de menos.
2009-11-13 21:12
Con el perrito, sin duda.
El gatito y la cabra están soberbios, pero el perrito es insuperable.
Ni siquiera Clooney, Bridges, McGregor y Spacey pueden superar la cara de ese perro.
;-)