Enjundiosa entrevista a María Kodama de Harold Alvarado en la que salen a relucir varias anécdotas y curiosidades del siempre actual Borges; por ejemplo, las razones por las que nunca recibió el Nobel: “Porque como usted podrá recordar, en dos ocasiones burló las aspiraciones de Arthur Lundqvist, el académico sueco que prácticamente concedía el Nobel a los escritores de nuestra lengua. La primera, cuando Victoria Ocampo le trajo hasta Buenos Aires, le organizó una cena en San Isidro y puso a Borges al lado del sueco, que con su tradicional apetito de gloria leyó a Borges uno de sus poemas y Borges le dijo que le parecía digno del inventor de la dinamita, y luego, cuando en Chile le ofrecieron aquel doctorado en la Universidad Católica siendo Pinochet el dictador y le llamaron para advertirle que si iba a recibirlo no recogería el Nobel ese año y respondió que había dos cosas que un hombre no se puede permitir: Ni amenazar ni ser amenazado, ni chantajear ni ser chantajeado.” [Ref.: uTelI ]