Diana Pazos, Ballenas a la vista: “Entre las leyendas, la literatura y la dura realidad de la caza indiscriminada, el avistaje de los mamíferos más grandes del mundo resulta un verdadero recurso en la lucha por su conservación. Al menos 9 millones de personas alrededor del mundo participan en el avistaje de ballenas al año. Sin embargo, algunas ofertas pueden poner en peligro a los animales.
En la medida en que el turismo ecológico crece a nivel internacional, los especialistas reclaman la mejora de marcos de trabajo locales, nacionales y regionales para lograr avistajes sostenibles. Según Erich Hoyt, experto mundial en observación de cetáceos y áreas marinas protegidas, «el avistaje de alta calidad es una invaluable contribución al desarrollo del ecoturismo marino y la conservación de las poblaciones de ballenas».”