Lorenzo Contreras: “Lo sugerente para España de las memorias, interesadas o no, de Günter Grass, es una cierta equivalencia entre el ardor adolescente del miembro de las Waffen SS y el que invadió a no pocos compatriotas nuestros en los años del primer franquismo. Sería interesante, incluso divertido, rastrear en el pasado, algo más que adolescente, de muchos demócratas de la España actual. No todos han muerto o, como dijo, creo, Fernando Vizcaíno, “algunos no hemos muerto”. Los que han sobrevivido y no han corrido el riesgo de que se sepa por dónde respiraban entonces, puede que hoy militen en formaciones de izquierda tipo PSOE, o en organizaciones o partidos de derecha que presumen de velar por la integridad de las libertades. Serían casi innumerables los Günter Grass que saldrían de debajo de las piedras, si un milagro les hiciera brotar de sus sombras.” Los que no jugaron a ser Günter Grass.