Carlos Sebastián: “La frecuencia con la que los usuarios de líneas áreas, una proporción muy alta de la ciudadanía en estos meses estivales, son víctimas de inesperadas arbitrariedades es muy alta. Y no me refiero a situaciones como la creada por la violación del Estado de Derecho hace unos días en el aeropuerto de El Prat, que situó en un infierno a miles de viajeros, ni tampoco a las terribles noticias que vienen de Londres cuando estoy redactando estas líneas. Sino a los pequeños atropellos que las compañías, sin excepción, cometen continuamente desde la más completa impunidad.” El purgatorio de los aeropuertos.