Manuel Martín Ferrand: ” Si esto, España, fuera una Arcadia feliz y sin problemas, si esto no fuera lo que es, estaría muy bien lo de las vacaciones. Incluso perpetuas. Pero aquí, desde la forma del Estado, que está en veremos, hasta la seguridad, que no existe, pasando por los epígrafes que definen a cada uno de los ministerios del Gobierno, todo es un problema. En consecuencia esas vacaciones tan formales, tan instaladas, parecen frívolas. Una vida laboral dura cuarenta o cincuenta años. Es lógico y justo, necesario, aliviarla con periodos vacacionales tasados y amplios; pero la responsabilidad política, a la que se accede de forma voluntaria, es corta y eventual. Ahí no caben las vacaciones “laborales” tal y como las disfrutan nuestros elegidos.” Las irresponsables vacaciones del 2006.