“Los intereses estadounidenses y europeos confluyen en un punto: la OTAN tiene que seguir existiendo y hay que buscarle misiones. Está claro que será el Pentágono el que decidirá contra quién, dónde, cuándo y cómo. Habrá nuevos “ejes del mal” y se adoptará la vieja y cómoda práctica de disparar primero y dar el alto después”. ¿Qué hacer con la OTAN?, de Alberto Piris.
Marcos Taracido | 19/06/2002 | Artículos | Política internacional