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Todas las leyes de la monarquía son nulas

Antonio García Trevijano, Todas las leyes de la monarquía son nulas: “Las leyes promulgadas desde que entró en vigor la Constitución de esta Monarquía de Partidos, sin excepción alguna, son inconstitucionales. En consecuencia, todas ellas podrían ser declaradas nulas de pleno derecho si los que tienen la facultad de interponer el recurso de inconstitucionalidad (Presidente del Gobierno, Defensor del Pueblo, Cincuenta diputados, Cincuenta senadores, Órgano ejecutivo o Asamblea de las Comunidades Autónomas) lo instaran ante el Tribunal Constitucional, y éste fuera una instancia independiente del poder político.
No es necesario ser jurista ni mero leguleyo para darse cuenta de este gravísimo hecho que, por sí solo, niega la pretenciosa propaganda de que estamos viviendo en un Estado de Derecho. Pues la Constitución prohíbe al poder legislativo que acuerde leyes por mandato imperativo a los diputados que las adoptan. Y ni una sola ley ha sido votada sin mandato imperativo de los aparatos de los partidos políticos a todos los diputados-votantes de sus respectivos grupos parlamentarios. La Constitución dura porque no se cumple en uno de sus principios fundamentales. ”

Marcos Taracido | 14/06/2006 | Artículos | Modelos de Estado

Comentarios

  1. Papá Boneke
    2006-06-15 01:47

    En la afirmación de que este país no constituye un estado de derecho, estoy de acuerdo con el Sr. Trevijano, aunque por muchas otras razones que las referidas, y hábilmente no mencionadas por él.
    El desprestigio galopante de los medios de comunicación en este país nuestro, trae como consecuencia el hecho de que cualquier iluminado de turno, propicie una captación de adeptos a una idea oculta y furibunda simplemente afirmando obviedades desde un sermón demagógico de reverendo mediático, obviedades que hace suyas y disfraza de novedosas primicias.
    No se que tiene que ver la ausencia de un estado de derecho, con el proselitismo hacia “la causa” del Sr. Trevijano.
    Es decir, como no hay un estado de derecho, escuchen el nuevo evangelio según San Trevijano y síganme.
    A río revuelto, ganancia de pescadores.
    Porque, si, existe una “causa” del Sr. Trevijano.
    Para aquellos que desconozcan el dato, el Sr.Trevijano intervino en la redacción del fiasco de la primera constitución de Guinea Ecuatorial, redactada en la España del general Franco.
    Esa constitución planteada por él, paralelamente y de facto, consideraba como el candidato mejor para la futura presidencia de Guinea Ecuatorial, a Francisco Macias Nguema Mbasogo, que con el devenir de escasísimos tres meses de independencia, resultó ser el lunático, sanguinario, asesino y genocida de los de mayor talla del continente africano.
    Constitución planteada por el señor Trevijano, sin el menor conocimiento de Guinea, de la idiosincrasia del pueblo guineano, ni de sus creencias ancestrales, ni de ninguna otra circunstancia relaccionada.
    Después de aquel estrepitoso fracaso que llevó a Guinea Ecuatorial a un estado de terror, caos y oscuridad, el señor Trevijano parece haber encontrado el arquetipo definitivo de la situación que buscaba.
    El paradigma del redactor de constituciones.
    El paraíso del creador de ley de leyes.
    El nirvana definitivo y el karma absoluto largo tiempo buscado.

    Por fin, puede acariciar la idea sublime de superarse a si mismo.
    En 1968 abocó a Guinea al desastre y al terror.
    Esta vez, en 2006 y en España, intentará con todos” los medios” a su alcance, superarse a si mismo.
    Cantos de sirena, inocentes ciudadanos, desinformación por decreto, caos e iluminados de turno.
    Peligroso cóctel para un pueblo, ganancias para iluminados.

    Boneke

  2. joseluis
    2006-06-15 14:27

    ¿No es un tanto excesivo culpar, como casi lo hace usted, a García Trevijano por aparecer en Guinea un sanguinario criminal?

    Que bien recuerdo, en cuanto el país alcanzó la independencia y Macías la presidencia, se quitó la máscara. ¿Hubiera debido incluir la constitución guineana algún artículo prohibiendo quitarse máscaras?

  3. Papa Boneke
    2006-06-15 16:27

    Don Jose Luis, no acuso, afirmo, que Francisco Macias Nguema no tenía ninguna máscara antes de Octubre de 1968, era transparente hacia muchos años para el que se tomara la molestia de tratarle y observarle.
    Todos los que verdaderamente conocíamos Guinea, sabiamos como era ese personaje sobradamente y lo que se podia esperar de él.
    Afirmo, que el Sr.Trevijano decidió apoyar a F.Macias debido entre otras cosas a su absoluto desconocimiento de Guinea, sus gentes, sus necesidades y su idiosincrasia.
    Honestamente habria necesitado conocer todas esas cosas y otras muchas más,antes de atreverse a redactar nada menos que una Constitución para un nuevo país.
    Y también afirmo, que esa, no fue la única de sus intervenciones lamentables en el proceso de la independencia de Guinea.
    El tema del nuevo banco guineano y la paridad y la puesta en circulación del Bikuele, fue otra de tantas gestiones cuya exposición seria larga y lamentable.
    Sobre el proceso de independencia de Guinea y los trágicos sucesos posteriores amigo mio, la información es escasísima por aquello de la declaración de “materia reservada” y solo los que allí estábamos, conocemos los entresijos del asunto, incluida la oscura intervención del S. Trevijano.
    Saludos

  4. Marcos
    2006-06-15 19:14

    Pues acaba de publicar una especie de segunda parte de este artículo el señor Trevijano: Los partidos de la Monarquía son inconstitucionales.:

    «Si los partidos, aunque quieran serlo, no pueden ser democráticos, habrá que dignificarlos con estas tres medidas preventivas de la libertad política: 1. Sacarlos del Estado para evitar que éste se oligarquice políticamente. 2. No obligarlos a ser democráticos en la Constitución, para que ésta sea verídica. 3. Cambiar el sistema electoral de listas por el tradicional, para que el sistema de poder en el Estado sea representativo de la sociedad civil.»

  5. Papa Boneke
    2006-06-15 20:00

    De acuerdo con Marcos al 100%.
    Pero eso, no lo dice solo el Sr. Trevijano, lo dice cualquier ciudadano que dedique un mínimo de su tiempo a observar el circo político actual y a deducir consecuentemente.
    Lamentablemente, el problema es que personajes que observan esa circunstanica, hacen suya la causa, la abanderan y utilizando los mismos medios y resortes que critican, pretenden acaudillar revoluciones indefinidas y peligrosas en cuanto a la credibilidad que merecen al desconfiado, harto y perplejo ciudadano.
    Ojo, porque situaciones de confusión como estas y en otros momentos históricos, acabaron por rebosar por donde nadie lo esperaba.

  6. joseluis
    2006-06-15 22:08

    Ya estoy perdiendo el hilo. Veamos: si resulta que era previsible Macías como sanguinario dictador que fue, la responsabilidad era del Gobierno español de entonces (Franco, Fraga et alii). Que García Trevijano tuviera por aquel entonces un papel lamentable o no, será cosa, claro que comparativamente, secundaria.

    Y dejando a Guinea y volviendo a lo que dice Trevijano sobre la República española, y las ilegalidades resultantes de la (por decir así) Gran Ilegalidad que es la actual constitución, no sé muy bien a qué viene declarar ilegales a los actuales partidos “en tanto la Constitución”. Que he perdido el hilo, vamos. Los (grandes y algunos pequeños) partidos españoles serán culpables de un sinnúmero de cosas, desde su falta de democracia interna hasta su más que sospechosa corrupción, desde que aplicaron a Batasuna (que desde luego tampoco es mi santo) una Ley de Partidos que bien podría aplicarse a ellos mismos … de muchas cosas, y también de otras más “técnicas” o éticas, grandemente deseables, como las listas abiertas, la fiscalización completa de sus cuentas … pero es que si mezclamos los partidos con la Constitución, y (casi toda) ésta, con la Monarquía, es que ya no sé de qué cosa estamos hablando.

    Que me he perdido, vamos. Saludos.

  7. Papá Boneke
    2006-06-19 01:05

    Ese es el problema y al mismo tiempo el objetivo de algunos Jose Luis.
    Conseguir que el mayor número posible de ciudadanos, tenga intimamente que admitir : ¡¡¡ Que me he perdido, vamos. !!!

    Estoy de acuerdo en todo lo que dices incluso “casi”, en lo de Macias-Trevijano, pero efectivamente eso es otra cuestión.

    Saludos y ánimo, que no nos hagan perder el norte entre unos y otros.


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