Luis Moreno Ocampo, fiscal de la Corte Penal Internacional, hace un repaso quizás demasiado optimista de las actuaciones del organismo, y se congratula del futuro: “Cada vez se aprecia mejor el impacto del Estatuto de Roma en escala mundial. Los ejércitos nacionales ya empiezan a modificar sus procedimientos. Las fuerzas paramilitares de Colombia han mencionado la existencia de la Corte Penal Internacional como motivo para proceder a la desmovilización. Los fiscales de los Países Bajos, que procesaron a un empresario neerlandés por avivar el conflicto de Liberia, mencionaron la Corte como inspiración de su decisión. La Interpol ha difundido nuestras órdenes de detención contra Kony y la cúpula del Ejército de Resistencia del Señor. Los Lubanga del mundo entero temen que les espere una suerte parecida; saben que se trata de la primera detención, pero no de la última.” Un sistema mundial de justicia.