Me interesó este artículo porque hace una serie de preguntas que debería poder hacer cualquier periodista, pero que no se hacen. O por lo menos no se publican las respuestas. (Podríamos volver a la mini-polémica aquella de la profesionalidad de la prensa y de la internet.) Javier Ortiz: “La extrañeza por las cartas amenazantes era de cajón. Si ETA ha proclamado que renuncia de manera «permanente» a atentar contra personas y cosas, ¿en qué podría consistir su amenaza? ¿En mirar con mala cara al no pagador? ¿En retirarle el saludo?
También la discriminación vasco-navarra resultaba muy rara. ¿Por qué habrían de pagar sólo los empresarios gobernados por Sanz y no los tutelados por Ibarretxe? ¿Culpará ETA a los empresarios navarros de que su presidente sea tan así?
Al cabo de un par de días ya nadie hablaba de «remesa». Los noticiarios empezaron a decir que las cartas recibidas habían sido «algunas». ¿Algunas? Vale, pero ¿cuántas? ¿Dos? ¿Diez? ¿Veinte?
Un medio de comunicación mencionó la cifra de cuatro, pero al estilo del periodismo de ahora: sin citar fuentes concretas ni responsabilizar a nadie del dato.
Para acabar de hacerlo todo más raro, la Policía declaró que sólo había recibido una denuncia, por lo cual, muy lógicamente, sólo tenía constancia de la existencia de una carta. ¿Y las demás? ¿Debemos pensar que hay empresarios navarros que se arriesgan a contar su drama a las autoridades políticas y a los medios de comunicación, pero que prefieren no decir nada a la Policía? ¡Gente bien singular, a fe, que sólo se confía a los más indiscretos!” ¿Cabe creerse algo?.
2006-04-19 11:36
Esta gente de Rebelión tiene una cara que espanta: fusilan un artículo por la jeta y ni se molestan en poner un enlace al original.
2006-04-19 13:50
Bueno, a ver, que conozco el caso con todo detalle. La denuncia de cartas etarras vino de un impresentable sujeto, eterno presidente de la Confederación de Empresarios de Navarra (aunque más que nada, importante afiliado a la rama local del PP, que se llama Unión del Pueblo Navarro y que desde hace muchos años malgobierna esa provincia, por cierto un importante foco de corrupción), que se puso a lanzar histéricas declaraciones sobre la “nueva remesa de cartas etarras”. En consecuencia de la presunta remesa, “no había tregua etarra” y etc. y de paso críticas a Zapatero y a los nacionalistas (?¿?¿). Interrogado el tipo ese, después de docenas de contradicciones, parece que ha podido exhibir una sola carta, sin sobre ni fecha, que a lo mejor llegó muy tarde por algún fallo de su cartero, o tenía guardada en un cajón, o … piensen ustedes lo que quieran sobre del dónde salió la presunta carta.
Y en resumen, que véase el nivel de los empresarios navarros, véase las ganas que algunos peperos tienen de tregua y de paz, véase que el tipejo ese mejor estaría en la cárcel una temporadita. Saludos.