Luis Álvarez, El sexo y otros demonios: “Traer niños al mundo, «todos los que Dios quiera», es y será, a su juicio, siempre una bendición de Dios. Al fin y al cabo, ¿qué importa que el 49% de los niños guatemaltecos padezcan de desnutrición, según el Programa Especial de Seguridad Alimentaria de Centroamérica?
Hay apenas que cruzar la frontera para llegar a Honduras y toparse con miles de niños que deambulan por las calles convertidas en hogar. Un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo encontró que el 60% de ellos padecen de depresión y seis de cada cien optan por el suicidio.
Pero en Honduras, como en Guatemala y El Salvador, para citar apenas tres casos, la cúpula católica sigue combatiendo fieramente los planes para brindar educación sexual a los jóvenes y evitar traer al mundo niños no deseados.”
2006-04-14 21:30
“Mientras en un país haya niños trabajando y adultos sin trabajo, la organización de ese país es una mierda”.
Monterroso.
Las religiones han hecho demasiado daño a la humanidad…