Sergio Ramírez, Paraguas y máquinas de coser: “André Breton, cabecilla surrealista, quiso demostrar la máxima tensión de las incongruencias al hablar del encuentro fortuito de una máquina de coser y un paraguas en la mesa de un quirófano. Me parece que esa es la distancia que media entre Michelle Bachelet y el coronel Chávez, por ejemplo, o entre él mismo y Lula de Silva, y aún entre Evo Morales y otra vez Chávez. Y no es un asunto sólo de estilos y de atuendos, que Evo Morales se niegue a ponerse traje y corbata, y que Chávez se haga vestir por sastres exclusivos. Es un asunto de entornos, realidades, y posibilidades.
Un ejemplo. Uno de los grandes proyectos de integración sudamericana patrocinado por Venezuela, y en el que participan Argentina, Uruguay y Brasil, es la construcción de un gigantesco gasoducto de veinte mil millones de dólares que partiendo desde la Guayana venezolana se extenderá a lo largo de ocho mil kilómetros. Esta magnífica quimera tiene ya enemigos que aseguran que no es rentable. Pero su principal adversario es Evo Morales, supuesto pupilo de Chávez, porque Bolivia, cuya principal riqueza es el gas natural, no ha sido tomada en cuenta, y los países donde el gasoducto abrirá sus llaves, además de aliados, son hasta ahora sus principales clientes. ”