Mario Roberto Morales: “La crítica de la lógica cultural que propone el lucro como el motor de la libre generación de riqueza, no consiste en negar la libertad de lucrar sino en dilucidar de qué manera se lucra a fin de establecer si este acto natural puede constituir o no una violación a la libertad de los demás, como ocurre con las prácticas monopolistas de las oligarquías que coartan la libertad de empresa y el derecho de los otros a lucrar. Y puesto que se trata de un problema de poder, la pregunta pertinente sería: ¿es el lucro un derecho o un privilegio? No se trata de oponerse a que las personas intercambien libremente bienes y servicios ni a que lucren haciéndolo, sino a que ese acto les sea denegado a las mayorías por quienes tienen el poder económico suficiente para acapararlo y hacer de él una actividad exclusiva y privilegiada, porque controlan los medios y mecanismos de la producción, circulación y consumo de mercancías.”
El privilegio del lucro.