Russell Mokhiber y Robert Weissman,
El legadotóxico.com de la Ford: “Resulta que durante varios años, la Ford Motor Company arrojó millones de galones de sedimentos de pintura en una zona ahora residencial del norte de Nueva Jersey.
[...] Según esta serie, antes de cerrar en 1980, la fábrica escupió seis millones de vehículos y un océano de contaminantes, incluidos sedimentos de pintura suficientes para llenar dos de los tres tubos del Túnel Lincoln.
Se arrojaron millones de galones de sedimentos de pintura en la parte más alejada de Ringwood, que ahora es una zona residencial. Los niños jugaron en ellos. Los arroyos los bañaron. Y a principios de año, las autoridades de Nueva Jersey anunciaron que algunos índices de cáncer en la zona eran excepcionalmente elevados.
Las pruebas encargadas por el Record encontraron plomo, arsénico y xilemas en los sedimentos… algunos 100 veces los niveles considerados seguros por el gobierno.
El Record descubrió que la Ford hizo vertidos reiteradamente en comunidades pobres y no limpió lo que había ensuciado.
Los periodistas del Record desenterraron documentos que demostraban que los ejecutivos de la Ford sabían hace ya 34 años que sus residuos habían contaminado un arroyo que desemboca en el embalse de Wanaque.
Los documentos muestran que la empresa intentó eludir su responsabilidad ofreciendo tierras contaminadas como un “regalo” al estado, informó el diario.
[...] Sobornaron, amenazaron, e incluso asesinaron para mantener el control de la basura de la Ford, informó el diario.”