Enric Castelló defiende y celebra la reedición (ampliada) de la excelente novela de Josep Lozano,
Germanía. Lo que anoto aquí es la oportunidad que Castelló se da para atacar al cosmopolitismo de baratillo que vive de la baja autoestima de los países hispanos. Lo que él critica se da con frecuencia en esos países (mientras que en los anglosajones, por poner un ejemplo, o en Japón, por poner otro perteneciente a una cultura fuerte, se da escasamente). “Entre algunos críticos y periodistas existe a menudo el pensamiento de raíz provinciana de considerar que lo que se produce cerca, que los escritores autóctonos, son por necesidad poca cosa, minucia cultural, creadores de baja estofa. Estos “intelectuales” se llenan la boca hablando de clásicos, de autores nacidos en tierras lejanas, de escritores en lenguas fuertes, mientras que desconocen, menosprecian o simplemente rechazan el nombre de sus autores contemporáneos. Es evidente que en casa ha habido mejores y peores escritores, pero dejar de hablar de ellos por el simple hecho de tenerlos cerca nos parece una actitud incomprensible y que solo destila la propia mediocridad.”
Vía valenciana.