Robert de Herte,
Panóptico: “Hostiles a toda opacidad social, las democracias liberales se han dotado de un ideal de “transparencia” que no puede realizarse más que mediante la ingeniería social. La sociedad se transforma entonces en un bunker protegido por contraseñas, códigos de acceso, videocámaras de vigilancia. La multiplicación de espacios reservados, siempre con fines de seguridad, los sustrae al uso social y acaba por desaparecer la noción misma de espacio común, que es el de la ciudadanía . Así se crea un Panóptico aun más temido que el diseñado por Jeremy Bentham, pero con su misma función: verlo todo, oírlo todo, controlarlo todo.”