John Saxe-Fernández: “El punto central es que, como resultado de cuestionables usurpaciones electorales y de funciones legislativas y judiciales, Bush colocó a Estados Unidos, por medio del Acta Patriótica, en un ‘’estado de excepción’’ que se invoca, significativamente ahora, cuando las encuestas muestran un perceptible deterioro de la posición del “presidente” ante el electorado, comparado con la excepcional fuerza política que logró inmediatamente después de los ataques terroristas, y luego de la detención de Saddam Hussein. Y es que, como advirtió hace poco Daniel Ellsberg, oficial de inteligencia que hace tres décadas dio a conocer los documentos del Pentágono y fue llevado a juicio por filtrar la información que finalmente liquidaría a Nixon y la escandalosa política que apuntaló la guerra de Vietnam, los ataques del 11 de septiembre “fueron pretexto para invadir un país que no nos amenazaba y para desmantelar nuestras libertades y derechos ciudadanos”.”
Bush: ¿autogolpe en Estados Unidos?