Volar a y por EEUU parece cada vez más una pesadilla. Horas de colas en los aeropuertos (hay que quitarse chaquetas, jerseys y zapatos para pasar por los detectores de metales, hay que vaciarse los bolsillos, sacar el portátil de la bolsa); el clima es de estado policial. Los aeropuertos están llenos de policía secreta que interroga al menor indicio de diferencia. Últimamente, las personas afectadas han sido periodistas y la cosa se ha comentado.
Juan Gelman relata algunas de sus experiencias. “El prestigioso narrador Rohinton Mistry, nacido en la India y ciudadano canadiense, interrumpió una gira de conferencias por el país de Lincoln en el año 2002. Lo acompañaba su mujer y en cada aeropuerto eran detenidos e interrogados “hasta un punto en que la humillación resultó insoportable para ambos”, confió al The Globe and Mail de Toronto Alfred A. Knopf, el editor neoyorquino de Mistry. Como George Fernandes [ex ministro de Defensa de la India], Mistry no es responsable del color de su piel.”
Historias de aeropuerto.