Comentarios

1. mp
   2004-06-30 10:59 ¿Árabes? ¿No querrá decir musulmanes? Este Ugarte… Los marroquíes no son árabes. Ni los argelinos. Ni siquiera los paquistaníes.
2. David
   2004-06-30 12:10 Lee el artículo antes de hablar.
3. sapena
   2004-06-30 13:01 David, yo no entiendo tu postura acerca del idioma. Evidentemente es más cómodo, y podríamos decir que es un cierto signo de autonomía, el poder dirigirse a las autoridades públicas en cualquier lengua que sea la materna del ciudadano. EL problema reside en que todo ello debe ser sufragado por los demás conciudadanos, con otro derecho a que se respete su propiedad y se gaste el menor dinero posible. Por otro lado, entiendo que se debe exigir en cierto modo el conocimiento de la lengua oficial como garantía de potencia de mestizaje (yo prefiero hablar de pluralidad de culturas, el otro término está muy quemado por los músicos de la SGAE). ¿No crees que es mínimo del conocimiento de la lengua mayoritaria es un modo importante de control de la individualidad del sujeto, por ejemplo contra una posible marginación en guetos provocada por los padres.? ¿Porqué es buena la mezcla con las culturas árabes y no con la americana que puede parecernos más atractiva? ¿Porqué hay que defender una y protegerse de la otra? Tras criticar: me parece original, interesante, y muy útil el trabajo que haceis de creación de redes, nexos de unión entre personas, para el intercambio de información. Un saludo.
4. David
   2004-06-30 14:39 Bueno, lo de las lenguas es símplemente una cosa básica de igualdad de oportunidades. Me niego a dar ventajas a un maltés respecto a un catalán o un gallego por el hecho de la existencia de un estado maltés. Por eso la alternativa no es el par inglés/francés que generaría dos tipos de europeos, una primera clase se relaciona con las instituciones en lengua materna y una segunda que no. Políticamente además esta igualdad entre individuos (o todas las lenguas maternas o ninguna) ofrece una oportunidad respecto a nuestros vecinos que es la que planteo aprovechar a medio plazo… ¿O es que una Europa democrática no incluiría de alguna manera a un Marruecos y Túnez democratizados, a Turquía, a Israel? Respecto a América y los valores americanos… pues no puedo estar más de acuerdo contigo. No seré yo el que defienda murallas culturales ni el que desprecie la cultura americana. Al contrario, pero una cosa es aprender y mezclarse y otra aculturarse. Los europeos debemos mucho de lo bueno q tenemos (libertades incluídas) al mundo anglosajón: Desde el habeas corpus a Internet… pero eso no quiere decir que no nos fertilice igualmente nuestro Sur. Al contrario, aportar y competir es la misma cosa. Y ambas sólo se hacen desde la existencia, que no exaltación, de la diferencia, desde la diversidad. Y la diversidad europea incluye a los euroárabes de un modo muy especial y fertil. Por eso el símbolo del rai y los kebabs como símbolos de esa Europa nueva que toma de todo lado y aporta la mezcla. Y una nota respecto al optimismo: es cierto q es un artículo optimista… pero creo que es que hay mucho también en estos procesos de actitud, de profecía autocumplida. En ese sentido ser optimista puede que pague… y yo estoy dispuesto a intentarlo :)
5. Roger
   2004-07-01 00:07 En cuanto a la diversidad, creo que más es mejor. Si pensamos en los totalitarismos del XX, desde la modernidad sublime (Le Corbussier) a los regímenes nazi, fascista y soviético, su idea de orden y progreso es en realidad que haya menos. Y esta “menos”preciación es compensada con la monumentalidad, las pocas grandes obras públicas en lugar de las muchas obras privadas lanzadas hacia lo público. En Valencia invertimos en la ciudad de las Artes en lugar de la multiplicidad de ofertas teatrales; en la Biblioteca Valenciana en lugar de las multiples bibiotecas de barrio (las hay pero casi vacías de contenido); esas obras deben ser complementarias y no compensatorias. La multiplicidad de pequeños proyectos, de los cuales puedan surgir, por éxito, proyectos más grandes, que vengan desde la sociedad civil, es una forma más efectiva de promover el crecimiento, tanto cultural como económico. ¿Un gran ejemplo? San Francisco. O sea la revolución informática, Silicon Valley.
6. mp
   2004-07-01 14:06 Oye, David, que he leído el artículo tal y como me sugieres pero el abuso de lenguaje permanece. Corrígelo y sé un poco humilde, anda.