Barbara Ehrenreich,
Un útero no sustituye a una conciencia: “Un cierto tipo de feminismo, o quizá debería decir un cierto tipo de feminismo ingenuo murió en Abu Ghraib. Era un feminismo que veía a los hombres como los eternos autores de los delitos, a las mujeres como las eternas víctimas y la violencia sexual de los hombres contra las mujeres, como la raíz de toda injusticia. [...] Parecía haber al menos cierta evidencia de que el sadismo sexual masculino, estaba conectado con la trágica propensión de nuestra especie a la violencia. Esto era antes de que viéramos el sadismo sexual femenino en acción.Lo que necesitamos es un nuevo tipo de feminismo fuerte y sin falsas ilusiones. Las mujeres no cambian las instituciones simplemente incorporándose a ellas, sino decidiendo luchar a conciencia para cambiarlas. Necesitamos un feminismo que enseñe a las mujeres a decir no, no sólo al violador de turno o a un novio demasiado insistente sino, cuando sea necesario, a la jerarquía militar o administrativa en la que se encuentre. Resumiendo, necesitamos un tipo de feminismo que pretenda no sólo incorporarse a las instituciones creadas por los hombres durante siglos, sino infiltrarse en ellas y subvertirlas. ”