¿Comisión sobre el 11M para qué? ¿Para quedar bien todos y picotear algo al terminar? Vergüenza y decepción, y la demostración de que nuestra democracia cada vez se parece más a la prensa rosa: vive de montajes y burbujas. Y sigo esperado a que el nuevo Gobierno demuestre su talante. Otis W. Drifwood: “La comisión nace coja, tuerta y sorda de un oído, con un absurdo límite de dos meses a todas luces insuficiente para obtener un mínimo de conclusiones coherentes (la de los atentados del 11-S celebrada en el Congreso de EEUU ha durado nada menos que un año), con las comparecencias pactadas y constreñidas a lo que menos sangre pueda hacer, porque piensan que, total, el período electoral ya ha pasado y la memoria de los votantes es en general de corto recorrido. La única manera de enderezar este despropósito sería, en mi opinión, que la Televisión Pública diese muestras de su pretendido propósito de enmienda y retransmitiese, con luz y taquígrafos y sin escatimar detalles ni análisis, las comparecencias de este bluff de comisión, aunque sólo fuera para que los ciudadanos pudiéramos ver y oír a esos partidos pequeños (habitualmente los más eficientes en este tipo de pachangas) formular las preguntas que a todos nos gustaría hacer, y todavía más nos gustaría que fueran contestadas.” La pachaguita.