A
César Aira le revienta que le pregunten lo de qué libro se llevaría a una isla desierta… pues ninguno, claro, porque todos son asquerosamente finitos; en cualquier caso, qué biblioteca. “Con cierta alarma, que empieza a justificarse, advierto que ni siquiera así alcanzaría. aun superpoblando la isla desierta con una gran biblioteca y otras bibliotecas de contraste, y buenas librerías, y carteros, no sería suficiente. Porque la lectura es un aprendizaje; aunque la practiquemos sin ningún propósito utilitario, nos está enseñando a ver el mundo, y a entenderlo, y a orientarnos en él. Sin mundo, la lectura daría vueltas sobre sí misma en el vacío, y se haría fantasmal, quizá angustiante. De modo que tendría que haber ciudades, y trenes y aviones, selvas, elefantes, señoras ricas y niños pobres, un gato durmiendo en el marco de una ventana, un volcán en erupción, astronautas, filatelistas, supermercados… En los libros está todo, pero está como en un prisma que recibe la realidad, y la devuelve, y ese antes y después también es parte de la lectura.”
La isla desierta.
2004-06-22 14:53 Hay algunos otros artículos, que quizás interesen, a su disposición aquí. Gracias por todo: Saludos
2004-06-22 15:25 Desde que le oí decir que La Regenta era una mierda, me he dado cuenta que un escritor puede ser un desustanciado. Vaya tipejo. (Me gustaría señalar, asimismo, que en mi opinión La Regenta es la novela más importante de la literatura española de España. Ni Ulises ni hostias.)