Luis Peraza Parga: “Antes de que los EEUU desataran su agresión contra Irak, corrieron rumores de una propuesta de resolución de la tensión para Sadam Husein proveniente de un enviado de Putin, supuesto amigo de la infancia del sátrapa iraquí. Consistía en encerrarlo voluntariamente en uno de sus palacios desde donde gobernaría en comandita con un representante de la comunidad internacional para ser sustituido, después de un año, por un gobierno de nuevo cuño. Si esta propuesta hubiera funcionado se habrían ahorrado un montón de vidas humanas”.
Sadam Husein y la pena de muerte