Carlos Fuentes,
Bicentenario de Balzac: “Vivimos en un mundo absurdo, en el que las cosas circulan libremente pero los hombre y las mujeres no, sino sufren prohibiciones, persecusiones y muerte. Darle fuerza a los seres humanos, quitárselo a los objetos inertes es hoy la aventura quijotesca que nos impulsa a devolverle su centralidad a la persona, aun al precio de la incertidumbre y la duda, pero con la ganancia del reconocimiento y la fraternidad. Si Fernando de Rojas creó la tragicomedia de la circulación de las pasiones y los deseos, si Cervantes creó la novela de la incertidumbre en medio del dogma religioso y político más cerrado, si Balzac creó la novela de la desposesión en medio del dogma de la propiedad, acaso hoy nos corresponda crear la novela del reconocimiento en medio del dogma del desconocimiento que se llama puro entretenimiento. Que la novela del siglo XXI sea el lugar del encuentro de culturas diversas en un mundo de inmensos desplazamientos migratorios. Que en la cultura democrática de la literatura sepamos afirmar la continuidad de la vida, a pesar de la inevitabilidad de la muerte.”