Al parecer hay un nuevo tono de discurso en el Parlamento, algo que se venía pidiendo desde hace mucho tiempo. Y es necesario, porque los problemas que tiene que resolver España con respecto a su futuro, en todos los campos, son bastante serios. Muchos vienen desde la Transición, como la función del Senado. En aquel momento era difícil preverla, hoy es necesario empezar a construirla. Tanto Zapatero como Rajoy saben que hay trabajo que hacer y ayer se pusieron a la faena.
Pablo Sebastián: “Talante y buenos modales de Zapatero en un buen discurso, coherente con su programa y su proyecto político, en el que anunció el respeto de la oposición, la cercanía de los ciudadanos y la continuidad de la acción de gobierno porque, como dijo el candidato a la investidura, “no creo que todo vuelva a comenzar con mi llegada al poder”. Discurso que ha merecido la crítica detallada de Mariano Rajoy, como líder de la oposición, con modales también nuevos en el PP y ajenos a las tensiones y descalificaciones de los tiempos de Aznar en la tribuna del Congreso, pero sin renunciar a sus propios compromisos políticos. Zapatero estuvo bien y Rajoy también, y ambos escenificaron el tiempo nuevo que, por voluntad de ambos y necesidad de gobierno, se anuncia como dialogante y necesitado de pactos, porque de lo contrario iremos a unas elecciones anticipadas.”
Nuevo estilo de Gobierno.