Alberto Piris cree que lo de Monterrey ha sido una muestra más de la palabrería política que se deshace como azucarillo en el agua:
Las alforjas vacías de Monterrey: “Aunque el objetivo de la Conferencia era reducir a la mitad la pobreza en el mundo antes del año 2015, ni EEUU ni la Unión Europea se han comprometido a aportar la cifra que sería necesaria como ayuda directa, en opinión del Banco Mundial y de varias organizaciones de ayuda al desarrollo”.