GEES: “Casi cinco años después del final de la guerra en Kosovo la situación de la provincia acumula más problemas que avances. Existen aún graves deficiencias en los servicios básicos, la economía continúa siendo totalmente dependiente de la ayuda internacional, la integración interétnica está fracasando, el sistema democrático no se consolida, la proliferación de mafias resulta inquietante y para empeorar el panorama hay una creciente presencia de grupos islamistas con posibles conexiones con Al Qaida. Muchos europeos entenderían mejor las dificultades de Estados Unidos en Irak si miraran antes nuestro propio patio trasero en Kosovo.” Existen dos miedos paralelos en cuanto a los países musulmanes: que la pobreza proporcione seguidores a los grupos fundamentalistas, y que la riqueza les proporcione fondos. Quizá por eso no ha acabado de existir una política real tanto en Kosovo como en Afganistán. El útlimo experimento es Irak: ya veremos qué pasa.
Fracaso en Kosovo.