“Si vis pacem para bellam (si quieres paz prepara la guerra) decían los romanos y no tenían razón. La guerra nunca trae otra paz que la de los cementerios”. María Tena escribe de forma breve sobre el deseo de que aquello que intuye que muchas personas intuyen también ante situaciones que dicen e intentan aparentar ser otra cosa, no llegue a evidenciarse. Pero casi siempre ocurre que esas intuiciones, esa capacidad de ver más allá de lo explícito, esa visión ánalítica y crítica, de lo argumentado desde la aparente razón y el palabrerío, acaba mostrándose tal y como es verdaderamente. Y No queremos tener razón pero los hechos nos la otorgan.