“En la generación actual un 90 por ciento de la población llega a los 65 años y en el futuro puede que alcancen los 85 años la mayoría, y además el límite de la vida, que se estima en los 120 años, podría generalizarse entre las próximas poblaciones si se extienden las nuevas terapias, los conocimientos y los estilos de vida saludables”.
José Antonio Herce es uno de los autores del estudio sobre
Gasto sanitario y envejecimiento de la población española en el que se plantea dicha predicción, desde el enfoque de la estimación del mayor gasto sanitario ques erá necesario para atender la nueva realidad del futuro. A mí me preocupan las condiciones en las que la población se avejenta, y las condiciones en las que pueda seguir viviendo con dignidad; mi impresión es que la sociedad actual desecha el conocimiento y experiencia de la “vejez” escondiéndolo en “hogares de jubilad@s” o “residencias para la tercera edad”, mientras ensalza el ideal de lo eternamente joven. Así que me pregunto, ¿esta especie de marginalidad y exclusión que viven hoy nuestros mayores, es la que estamos cimentando en este proceso de mayor envejecimiento de la población?