David Casacuberta apunta una serie de posibles líneas a seguir por aquellas organizaciones activistas y ONGs que deseen utilizar la red para sus campañas, y en el análisis toca unos cuantos puntos esenciales para
hacer red: “Una actitud así [la de los elitistas cibernéticos] se da de tortas con el activismo serio y con el deseo de mejorar la vida de los ciudadanos. Afortunadamente, buena parte del activismo y las ONG que se mueven por la red últimamente han abandonado esos vicios y prefieren pensar más inclusivamente, intentando transmitir su mensaje al mayor número de gente posible. Esta es una tendencia vital que espero se mantenga. Es estupendo que existan digeratis, “gente de la red”. Pero será mucho mejor si en lugar de convertirlo en un privilegio trabajamos para conseguir que mucha más gente también sea gente de la red.”
En busca del tiempo perdido: nuevos modelos de activismo en red.