Propaganda y publicidad. De lo que se trata es de con-vencer, de engañar, de atrapar. El futuro es la publicidad: las publicitarias son las únicas revoluciones que veremos, las únicas vanguardias. Es la suplantación de la realidad: creemos, por ejemplo, que estamos viendo una película cuando nuestro cerebro está procesando la maravillosa posibilidad de comprar esos cereales que el protagonista se lleva a la boca, o ese cigarro, o esos pantalones.
Luis Alfonso Gámez relaciona el interés de determinadas cadenas de televisión en antiguos casos
Roswell con puro y simple afán de publicidad y promoción:
Sci-Fi Channel y los platillos volantes: la conspiración como gancho publicitario.